Bondad para las personas que no fluyen

Dicen los abuelos, (y ellos son los expertos en cualquier tema) que no todas las personas son gente, porque el que es gente es gentil y bueno; es una persona positiva que no vive para contradecir. Es una persona pura, como las flores blancas del jardín.

Hoy en día es parecido al tema de "dejar fluir"; en lo personal creo que hay personas que necesitan bondad en su alma, en su entorno y hasta en sus relaciones para que puedan fusionarse con el mundo en la simbiosis de bien por bien.

Supongamos un ejemplo de evento contrario; algo así: tienes una relación (ejemplo un matrimonio), pero eres infiel; entonces esa parte de ti no fluye, y tu frustración por no ser buena persona la llevas à otros planos. Se nota en la gente que ataca sin razón, en la que fija sus metas comparándose con los demás, o en la que busca aprovecharse de los menos suspicaces.

Ante estas personas; sólo se puede responder con "bondad", es algo así como el equilibrio de las cosas; si existe mal es porque se necesita el bien, hasta el odio se cura con el mismísimo amor.

Cuando intentamos conocer y aceptar, estamos creciendo en nuestra esencia, vamos abriendo ante nosotros un mundo diverso e interesante para explorar, para compartir y vivir.

Por las personas que no fluyen hay que orar, hay que tener bondad en el corazón para darles un ejemplo de que no todas las piedras que lancen harán daño; algunas de esas piedras son obstáculos para ellos mismos. Hay que tener piedad, para enseñar que todo se puede en la bondad.

Fluir es no prestar atención a las cosas tontas que nos pueden quitar quizá cinco minutos importantes; en mi caso cuando algo me quiere robar esos cinco minutos los aprovecho y escribo; es una excelente terapia para el corazón. Luego hasta agradezco a esas personas porque en ausencia de la luz, se puede ser el rayo que ilumina.

Voy a finalizar mis palabras con un mantra para las personas que no fluyen; recordemos que los mantras nos permiten liberar emociones y afianzar pensamientos positivos. Un inicio de fin de semana es propicio para iniciar una mantra; hagamos este:

Bondad para las personas que no fluyen, que el amor derrote sus ínfulas, que fluyan lejos sus locuras. Bondad para las personas que no fluyen; que Dios nos eleve del mal que buscan; que el perdón los cubra. Bondad para las personas que no fluyen, y que con nuestra sonrisa nada nos turbe. Amén.