¡Buenas noches queridos Stemians! Espero que se encuentren maravillosamente. El día de hoy cerraré el análisis de la super Saga Devil May Cry para PlayStation 2 con la revisión de su tercer y posiblemente más importante capítulo: Devil May Cry 3: Dantes Awakening. Es importante mencionar que a pesar de ser el tercer juego, en realidad se trata de la precuela de la saga: Es en este juego donde conocemos los orígenes de Dante como cazademonios, y profundizamos un poco más en su disfuncional relación con su hermano Vergil, así como con otros personajes relevantes para él.

El juego fue lanzado en Norte América el primero de marzo del año 2005, ¡vendiendo más de dos millones de copias en todo el mundo! Ciertamente el juego era sumamente esperado y fue un éxito rotundo, sin embargo, no estuvo libre de críticas: el nivel de dificultad de este juego es ¡endemoniadamente alto! Capcom escuchó a los fanáticos cuando se quejaron por la baja dificultad y el mutismo de Dante en Devil May Cry 2, por lo que con la tercera entrega decidieron volver a las raíces en cuanto a gráficos, guión, y otros factores entre los que se encuentra la dificultad. ¡Aunque al parecer se les fue la mano! Es por esto que Capcom en el año 2006 anuncia el lanzamiento de Devil May Cry 3: Dante’s Awakening Special Edition. Esta edición del juego contaba principalmente con la opción de jugar como Vergil, y permitía elegir la dificultad del juego para ajustarla a niveles más “humanos”.

Nuestra historia comienza con Dante en su negocio, cuando llega un misterioso sujeto llamado Arkham, quien viene en nombre de su hermano Vergil para traerle una críptica invitación, para desaparecer casi de inmediato. Dante lo sigue afuera, sólo para ver una enorme torre emergiendo de las profundidades de la tierra ¡y a Vergil de pie sobre ésta! Evidentemente, Dante se adentra en la extraña torre, denominada Temen-ni-gru, en pos de su hermano.

Casi al comenzar su viaje, Dante es atacado por una hermosa chica, también cazademonios, llamada Lady, ¡quien resulta ser hija de Arkham! Eventualmente Lady le cuenta a Dante que es hija de Arkham pero que busca matarlo porque el asesinó a su madre. Dante descubre además que Arkham es el aliado de Vergil en el objetivo de abrir la puerta del mundo demoníaco y conectarlo con el mundo humano, para lo que necesitan ambos amuletos de Eva y Sparda (los amuletos que poseen Vergil y Dante) y la espada de Vergil, Yamato.

Al continuar el ascenso por la torre demoníaca, ante Dante aparece un extraño arlequín llamado Jester, quien aparentemente le guía por la torre. Más Adelante, Dante y Vergil se enfrentan, resultando Vergil vencedor y llevándose consigo el amuleto de Dante para crear la llave al mundo de los demonios. Después de una serie de acontecimientos, Dante y Vergil se enfrentan una vez más, esta vez apareciendo en la batalla Lady y el extraño Jester, quien revela su verdadera identidad: ¡Arkham! El cual traiciona a Vergil y le arrebata la llave. Con esto, es Arkham quien abre la puerta al inframundo y obtiene la espada y el poder del mítico Sparda, padre de los gemelos, ¡y es prácticamente invencible! Es en ese momento cuando Dante y Vergil deciden, cada quien por sus propios motivos, unir fuerzas y derrotar a Arkham. Luego de la caída de Arkham, Dante y Vergil luchan una vez más, siendo esta vez Dante el vencedor, quedando Vergil encerrado en la torre.

Cuando esto ocurre, Dante comienza a llorar por la aparente muerte de su hermano, y cuando Lady le pregunta por qué lo hace, Dante lo niega y dice: “los demonios nunca lloran”. Lady le hace saber que efectivamente “podrían llorar si poseen un corazón humano. De allí proviene la expresión “Devil May Cry” (Los demonios pueden llorar) Y Dante decide llamar así a su agencia de cazademonios. Eventualmente el jugador descubre que Vergil sigue con vida…

Dificultad: como mencioné anteriormente, la dificultad del juego es sumamente elevada. Los enemigos son bastante fuertes y resistentes, y aparecen en gran número incluso desde las fases iniciales del juego. A pesar de que Dante cuenta con bastantes armas diferentes en esta oportunidad, a veces se siente que sencillamente los enemigos son demasiado poderosos para él.

Jugabilidad: Devil May Cry 3 es excelente. Los controles responden de una manera impecable, y el factor diversión es elevado. Dante en esta oportunidad puede accesar una mayor cantidad de armas y movimientos especiales, y puede cambiar su estilo de combate entre cuatro sistemas diferentes: gunslinger y swordmaster en el área ofensiva, y trickster y royal guard en el área defensiva. Más adelante desbloquea dos estilos de combate extra: quiksilver y doppleganger, lo que ciertamente aumenta el dinamismo de la acción y le permite al jugador ajustarse a su estilo de juego predominante.

Gráficos: los gráficos son a nivel general bastante agradables de ver. Son similares a los de la primera entrega del juego, pero están mejorados: vemos una mejor paleta de colores, y menos bordes serrados en los paisajes y durante las secuencias de video.

Devil May Cry 3: Dante’s Awakening es un juegazo. Retoma correctamente la senda que creó Devil May Cry (1) y que Devil May Cry 2 había cambiado de manera inexplicable. Las únicas críticas que recibió fueron la extrema dificultad y la imposibilidad de pelear contra un enemigo tan carismático como el extraño Jester: Ambas quejas fueron satisfactoriamente tomadas en cuenta y aplicadas en la Special Edition del juego, lo que ciertamente habla muy bien de Capcom como desarrolladora de videojuegos en aquel entonces. Quien no lo haya jugado, ¡que lo haga sin dudarlo ni un instante! Si es que puede terminarlo…