Diván Gamer: ¿Son los videojuegos perjudiciales?
Hola a todos, compañeros de Steemit. El día de hoy quiero salirme un poco de mi estilo usual de redactar artículos en forma de análisis gamer para compartirlos con ustedes en esta maravillosa red social. AMO los videojuegos, los considero más que un hobby una pasión, pero en horas de la tarde de hoy tuve una conversación con unos amigos que me dio mucho, MUCHO, que pensar: ¿son los videojuegos dañinos per se? ¿Son los problemas que provocan a la larga más graves que los aspectos positivos que ofrecen? Peor aún: ¿vale simplemente la pena tomarse la molestia de jugarlos en vez de hacer otras cosas?
Revisando una serie de artículos en internet, pude constatar que de hecho, las opiniones al respecto están fuertemente divididas. Por una parte, están los pro-gaming, quienes exponen una serie de argumentos muy sólidos sobre por qué es bueno y sano jugar a los videojuegos en general: desarrollo de la imaginación, idiomas, coordinación mano-ojo, posibilidad de mejorar la autoestima al conseguir logros dentro de los juegos que pueden proveer de una sensación de conseguir un triunfo por medio de sus propios esfuerzos, entre otros argumentos similares. Además de estas razones, los pro-gaming defienden la idea de que de hecho los videojuegos son una forma de arte digital, tan atractivos visualmente como la pintura y escultura, y con historias tan inmersivas y bien narradas como en la literatura y el teatro.
Por otra parte están los anti-gaming, quienes postulan que los videojuegos son básicamente una pérdida de tiempo y dinero: las habilidades adquiribles a través de los juegos de video que defienden los pro-gaming pueden ser perfectamente adquiribles por otros métodos en la vida real; los videojuegos son alienantes per se, siendo una abstracción poco sana, que hace que en lugar de enfrentarnos a nuestros problemas cotidianos y a nuestras dudas a nivel existencial sencillamente nos evadamos a través de un videojuego. Afirman además que los videojuegos tienen una grave consecuencia en el mediano y largo plazo: debilitan directamente las habilidades sociales del jugador, haciendo que sea cada vez más difícil relacionarse con personas en la vida real, convirtiéndole en una persona asocial, tímida y retraída.
Personalmente, considero que podría incluirse un tercer grupo, un poco más difícil de describir y delimitar, dentro del cual de hecho me incluyo. Se me ocurre llamarlo “gamers críticos”, jugadores que, a pesar de disfrutar enormemente su hobby, no lo defienden ciegamente, sino que toman en consideración los pro y los contra del mismo, apoyando las cosas positivas y siendo conscientes de las negativas, actuando responsablemente en consecuencia.
A título personal puedo afirmar que he pasado varias etapas en mi vida gamer, y siento que puedo hablar con propiedad sobre las mismas. He tenido la suerte de poder verlas en retrospectiva e identificar las cosas buenas y malas de cada una: Incluso he tomado descansos del gaming, en los cuales he guardado todas mis consolas (llegando incluso a pensar en venderlas) y dejando de jugar por meses enteros. En otras oportunidades, mi afición ha llegado a niveles sumamente elevados, en las cuales he invertido mucho tiempo y dinero en adquirir juegos y consolas para mi colección personal, y he dejado de hacer otras cosas para dedicarme el mayor tiempo posible al gaming, en detrimento de otras facetas de mi vida.
Como todo en la vida, el principal problema en este caso es el balance entre exceso y defecto. ¿Cuánto tiempo es positivo jugar videojuegos, utilizándolos como una válvula anti estrés, en estos tiempos tan frenéticos que vivimos? Y, por el otro extremo, ¿cuánto es demasiado tiempo invertido en videojuegos, tiempo que podría usarse para otras actividades más enriquecedoras a nivel personal? ¿En qué momento empieza a ser perjudicial? Son preguntas bastante densas, y en el caso particular de nosotros los gamers, a veces nos cuesta ser sinceros con nosotros mismos y analizar objetivamente la situación. Ciertamente, cada persona es diferente: lo que es positivo o perjudicial para una persona puede no serlo para otra. El detalle está en ser lo suficientemente sabio para reconocer el punto medio, el balance correcto. Porque todos los gamers que me leen SABEN que así como los videojuegos pueden prodigarnos de hermosos momentos, si no administramos adecuadamente el tiempo, el dinero y la energía que invertimos en ellos, ¡pueden hacer MUCHO daño! No es sorprendente leer testimonios de gamers, muchas veces incluso retirados, que hablan sobre familias destrozadas, relaciones dañadas, estudios perdidos, carreras profesionales truncadas, bancarrotas y otras trágicas consecuencias del abuso de los videojuegos cuando llega a niveles patológicos de adicción.
Es prácticamente imposible medir con certeza cuáles son los tiempos adecuados, por la simple razón de que no es viable crear una fórmula que aplique a todas las personas por igual: es lo que ocurre por ejemplo con las horas de sueño y la ingesta de alimentos. Incluso la ingesta de alcohol, la cual podríamos compararla con el consumo de videojuegos por su potencial de crear una adicción desde el punto de vista médico, es bastante variable de un individuo a otro. ¿Qué podríamos concluir de esa premisa? Que lo más importante es la auto observación, el auto análisis: encontrar el punto de dedicación al gaming en el que el disfrute no nos aliene, no nos distraiga de nuestras responsabilidades y obligaciones, y no afecte nuestras relaciones interpersonales en la vida real.
1) Los videojuegos tienen aspectos positivos y negativos, que tienen un impacto directo sobre la vida de las personas que los usan.
2) El uso adecuado de los videojuegos puede servir como sana distracción, pero el exceso es perjudicial en muchos aspectos de la vida.
3) Es de suma importancia determinar el balance entre el tiempo que jugamos y el tiempo que dedicamos a cultivar relaciones reales con las personas que nos rodean, fuera de las plataformas online propias de los juegos.
4) Es vital ejercer una posición crítica sobre el uso y abuso de los videojuegos, así como sobre sus bondades y perjuicios: no es inteligente encerrarse a defenderlos porque nos gustan, o a desvirtuarlos por que no.
¡Muchas gracias a todos por leer este post! En serio me encantaría leer sus comentarios y opiniones sobre este importante y delicado tema. ¡Hasta la próxima!
todo tiene su prioridad, @skinnzeero68 la verdad y buenol os juegos son buenos también yo aprendí historia con age of empires y aprendo estrategias y a cómo trabajar en equipo y en armonía en league of legend. te sigo y apoyo muy buena publicación
que bella, gracias! también te empecé a seguir :)
jeje @skinnzero68
Muy bueno tu post @skinnzero68, me encanto como abordaste el tema. Y básicamente es eso todo en exceso es malo como bien indicas en tu publicación. Saludos
bella, gracias!
Woww!!! Excelente post mi pana!!! Muuuyyy interesante de verdad!!! Felicidades por tan excelente redacción y trabajo de investigación. Un abrazo!!!
gracias Manuel! un abrazo fuerte :)
Este post es digno de estar en una revista, te felicito. En cuanto al tema, pienso que los videojuegos son como el Internet, como el alcohol, como los cigarrillos, en fin como la vida misma y me refiero a que todo varia en función de como se utilice, el Internet por ejemplo fue creado para un fin, unir mundos en post de la globalización, los videojuegos para entretener, etc... ya dependerá del uso que le de cada individuo y mencionas algo muy cierto:
Esto aplica para todo el aspecto cotidiano, es detenerte y darte cuenta donde esta los límites que rayan entre lo sano y lo perjudicial. Muchas cosas se dicen de los videojuegos, pero en lo personal le encuentro más cosas positivas que negativas. Saludos y gracias por compartir tan excelente post abierto al debate y opiniones diversas.
gracias por tu feedback @yaniria1 ! y si, lo importante, como lo menciono en el artículo, es encontrar el balance ideal entre el gaming y la "vida real"
Es que como todo en la vida, el exceso es dañino. Pero ¿qué hay de malo en distraerse un rato con videojuegos? A los que prefieren ver televisión nadie les dice nada, los que prefieres hacer otras cosas indebidas, tampoco. Atacan a un grupo que no le hace mal a nadie.
también es muy cierto. El problema está en que generalmente uno se abstrae. La TV por ejemplo no tiene esa fuerza q tienen los videojuegos para dejarlo a uno ahi pegado
what a game!
@originalworks