INTERESANTE REFLEXIÓN -LA ZANAHORIA, EL HUEVO Y EL CAFÉ.
Hola mis amigos de steemit, quiero compartir con ustedes algunas reflexiones que espero les sirvan de apoyo frente a esas situaciones conflictivas que vivimos a diario. Del libro titulado :_ El valor de educar-Parábolas_ del autor Antonio Pèrez Esclarin (2006), encontré esta interesante historia digna de reflexionar :
Un novicio se quejaba ante u maestro de lo difícil que le estaba resultando la vida. Había acudido al monasterio en busca de la paz, pero hasta allí le perseguían los conflictos y problemas. Cuando lograba solucionar uno, enseguida le surgía otro. Se sentía desanimado y estaba a punto de darse por vencido.
Su maestro lo llevó a la cocina del monasterio, llenó tres ollas con agua y las colocó sobre una llama fuerte. Cuando el agua comenzó a hervir, colocó en una de las ollas unas zanahorias, en los otros algunos huevos, y echó en la tercera un puñado de granos de café. Hecho esto, dejó que hirvieran un rato sin decir una palabra e ignorando por completo la mirada desconcertada del novicio.
Pasados unos veinte minutos, apagó el fuego, sacó las zanahorias y los huevos y, colocándoos en platos diferentes. >Después coló el café y lo colocó en un tazón. El aire se llenó de su grato aroma.
¿Qué ves?-preguntó el maestro.
-Zanahorias, huevos y café hervidos – respondió el novicio.
-Tócalos y dime cómo están –le rogó el maestro.
-Las zanahorias están blandas, el huevos y el café huele excelente.
Muy bien prosiguió el maestro, fíjate que las tres cosas enfrentaron la misma adversidad pero reaccionaron de un modo diferente. Las zanahorias llegaron al agua duras, fuertes, seguras de sí mismas y se volvieron blandas, frágiles, deleznables. Los huevos entraron al agua hirviendo extremadamente frágiles y se endurecieron. Pero solo los granos de café fueron capaces de transformar el agua. No tenía olor ni sabor y ahora huele y sabe de un modo bien sabroso. Así pasa con las personas: a algunos los problemas, conflictos y dificultades los destruyen; a otros les endurecen, pero son muy pocos los que logran asumirlos de tal modo que mejoren las cosas a su alrededor.
En cualquier relación humana surgen conflictos, es expresión de la diversidad de intereses y puntos de vista. Hay conflictos de pareja, con los hijos, vecinos y políticos entre otros. Por ello debemos aprender a vivir con ellos pero tomando en cuenta que hay que afrontarlos de la forma más positiva posible.
Los conflictos como las crisis pueden ser oportunidades excelentes para crecer, para salir robustecido, para crecer, para mejorar las relaciones y para emprender aunque no lo puedas ver en el momento. Cuando se está en el conflicto se tienden a tomar actitudes similares al ejemplo de las zanahorias, al huevo o al café, se endurecen, se llenan de rabia, dolor y violencia; o se inhiben, se ahogan ante la situación adoptando una postura de víctimas, lo cual no permite que las personas crezcan.
En mi país, Venezuela, estamos atravesando un conglomerado de situaciones o conflictos de distinta índole, sobre todo en el ámbito familiar, se puede considerar que la actual crisis (conocida a nivel mundial) ha contribuido considerablemente en la desintegración de muchísimas familias y suelen observarse conductas llenas de sentimientos de dolor y hasta impotencia entre los habitantes.