Arquetipos y superhéroes (parte I, Superman)

Hace ya muchas décadas en el pasado un grupo de judíos ñoños en los Estados Unidos crearon al superhéroe por excelencia, un tal Kal El, un alien proveniente de un planeta muy lejano llamado Krypton, el cual fue encontrado por una pareja de granjeros de Kansas, quienes no tenían hijos, y que decidirían adoptar al bebé que estaba dentro de esa nave espacial, y al cual llamarían Clark Kent, quien crecería como un ser humano pero llegada a la edad adulta decidiría utilizar sus poderes y su educación heredada de sus padres terrícolas para así ayudar al prójimo. Más tarde lo conocerían como Superman.

Kal El es el nombre que sus padres kryptonianos pondrían a nuestro querido hombre de acero, el cual tiene un significado en el hebreo: «la voz de Dios».

Sí, Superman no es sólo un alienígena venido de un planeta conflictivo, antiguo y avanzado como lo es Krypton, también para la época en que vio a luz, Kal El era lo mismo que sus creadores: una especie judío viviendo en los Estados Unidos, y como tal debía adaptarse al sistema y al ideal del sueño americano. Por otra parte, Clark Kent el tímido, un poco ingenuo, el de apariencia jovial pero conservadora, apuesto pero imposibilitado para resaltar no es lo mismo que Kal El, es decir, que Superman, el hombre más poderoso del planeta, aquel que sólo se limita al guión de su escritor, aquel arquetipo de héroe y personaje que representa no sólo al ideal americano que todos los gringos y extranjeros en ese país aspiran o aspiraban, sino también a todo lo que es bueno para los seres humanos de todo el mundo: el altruismo. Y sin embargo, Clark y Kal El no son necesariamente opuestos ni uno es la fachada del otro, son sólo partes del mismo ser a diferencia de Batman y de Bruce Wayne. Sin embargo, a Batman lo dejaremos para otro momento.

No importa quién, ni cómo, ni cuándo oiga el nombre Superman, el nombre, la imagen y el concepto es tan grande que hasta tu tío, el que hace un chiste verde del hombre de acero y la mujer maravilla lo recuerda ya sea por la época cómoda de los Súper Amigos, o a través de las películas clásicas interpretadas por Cristopher Reeves. La imagen de Superman es personal como la imagen que cada persona pueda tener de su dios pues el kryptoniano trasciende de ser sólo un personaje a pasar a ser un arquetipo de hombre poderoso y perfecto para la cultura pop.

Los arquetipos al igual que las mitologías existen como guías espirituales, culturales y artísticas desde los albores de la civilización, desde el momento en que nació la palabra y el hombre tuvo la imperiosa necesidad de contar cosas.

Desde el génesis de la humanidad, se han dado relatos, al principio de vía oral que narraban las travesías y hazañas de grandes héroes que sirvieron como inspiración para las personas del pasado, y algunas de esas historias como por ejemplo los relatos homéricos de La Ilíada y de La Odisea fueron y siguen siendo historias que inspiran a la humanidad ya sea a ser como sus héroes, a respetar y temer a los dioses como también a crear nueva literatura gracias a las basas que dichos relatos han dejado.

Después de todo, si algo tienen en común todas las religiones del mundo y todas las mitologías es a un señor de la luz, una especie de dios solar o que se asocia al rayo, los cuales son los elementos que pueden derrotar a la obscuridad. Se encuentran en Apolo, en Ra, en Jesucristo. El ideal del salvador siempre ha estado presente. Son de esas ideas que a priori parecen nueva pero que en realidad vienen de una base que viene de otra base que viene de otra base casi hasta el infinito como una especie de océano de consciencia colectiva por citar de alguna forma al lenguaje de Carl Jung acerca de que toda la humanidad está conectada por una consciencia colectiva, lo cual explicaría por qué culturas tan lejanas en términos geográficos y en el tiempo han tenido ideas similares sin ser idénticas, ya sea en los mitos y luego en la arquitectura.

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Los poderes de Superman

Por supuesto, los poderes de Superman han ido en incremento con las eras y han tenido que disminuirse a través del guión para que pudiera estar a la par de sus compañeros en la Liga de la Justicia, pero lo cierto es que el hombre de acero en su génesis tenía una fuerza limitada, sí, podía cargar vehículos de tamaño promedio pero no podía mover todavía a la Tierra o más planetas con facilidad, tampoco volaba si no que saltaba muy, muy alto, lo que no ha variado realmente es el misterio de cómo esconde su identidad secreta, tema para el cual hay cientos de respuestas, algunas más rebuscadas que otras, ¿pero por qué ha fe importarnos ese detalle? No es lo más increíble de un organismo que es tan poderoso en la Tierra como lo es nuestro Sol. De ahí es dónde viene que Superman sea una representación moderna del dios solar. Kal El es básicamente una batería solar viviente que siempre rompe las leyes de la física pues él puede viajar más rápido que la luz pero sencillamente no lo hace porque si lo hiciera destruiría a todo el planeta. Flash puede ir muchísimo más rápido que eso pero gracias a la speed force es que no destruye al planeta.

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El némesis

Lex Luthor es el enemigo más terrible que tiene que enfrentar Superman, y al igual que este, su maldad depende de su autor. Pero Lex Luthor viene a representar a la humanidad como una respuesta contraria a cómo la representa Superman. Superman son los valores, el altruismo y el sacrificio, Lex es el poder, la corrupción y la egolatría. Hay un cómic en donde logra asesinar a Superman pero luego durante una invasión de Brianiac debe revivir al hombre de acero para poder detener la invasión. Sin embargo, Lex afirma que ha entendido lo que es ser un superhéroe y que se siente bien la subida de ego que genera que la gente de todo el mundo te venere.

Las versiones de Superman

Las versiones de Superman sin muchísimas y dependen de su era como también de su autor. Para hacer la historia corta hablaremos de los hombres de acero del cine, comenzando por el de Cristopher Reeves. Este Superman desde la concepción misma de la propia banda sonora de la película daba a conocer a un Kal El venido de otro mundo, seguro, poderoso y sin contradicciones morales sabia cuál era su puesto en la Tierra, así como quién era él y qué debía hacer. Después de todo, su construcción fue más simple e idealista. Por otro lado, con The Man of Steel, lo más moderno que tenemos en el cine, al igual que con su antecesora, desde la concepción de la propia banda sonora del filme, se nos plantea una visión completamente diferente del hombre de acero. Hablamos aquí de un Superman imperfecto pero también igual de tímido cuando es Clark Kent; un kriptoniano que busca ganarse su lugar en el mundo. Se sabe poderoso pero no sabe cómo utilizar esos poderes. Es un agente del bien que podría convertirse en un dios bondadoso o en un dictador corrupto y totalitario como pasa en la saga de Injustice.

Todas estas visiones y versiones de Superman de acuerdo a sus autores han tenido como consecuencia que sea difícil crear una filmografia del hombre de acero debido a que como se mencionó anteriormente, la visión de Superman en todo el mundo es personal debido a su popularidad muy superior a la que tenían todos los héroes que conforman al universo Cinematográfico de Marvel tales como Capitán América, Iron Man, Hulk, Thor, y quizá la excepción a esa regla sea Spiderman, pero a Peter Parker claramente siempre se le ha escrito como un personaje completamente humano. Regresando a Superman, todo lo anteriormente nombrado, aunado a los errores de la misma DC son las que complican en exceso crear a una buena adaptación cinematográfica del hombre de acero. No en balde, considero tanto a The man of steel y a Batman v Superman como películas que valen la pena ver debido a esa visión tan refrescante que nos ofrecen y que sé que a muchas personas no les gusta ya sea porque no es el Superman que ellos conocen, o porque pudo haber sido una mejor adaptación.