-Si que tardaron- Se quejo Megan sin mirarlos.

-La enana tarda mucho en vestirse- Bromeo el joven guardián buscando enfadar a Margareth.

-¿Es una enana? ¿Qué hace una enana en Zedrant? - Pregunto Megan.... ¿Con malicia? no se podía distinguir ninguna intención en la voz de Megan, ni de duda ni de burla.

-¿Y tú una bruja? - Respondió retando la pequeña guardiana, cambiando su peso de un pie a otro.

Al darse cuenta de lo que había hecho su comentario, Logan decidió aclarar las cosas pero ya era demasiado tarde. Una estaba de pie frente a la otra.

-Muy valiente de tu parte llamarme así- Respondio Megan, no se sabía si con enfado o con intriga. Aunque fuese casi del tamaño de Logan, era muy difícil definir su edad.

-Nadie me llama enana- Las chispas saltaban entre ellas

Margareth le llegaba hasta la barbilla con la cabeza a Logan, mientras que Megan le llegaba por los ojos con la cabeza a Logan.

De un momento a otro, comenzaron a reír y a conversar entre ella. Padre e hijo se quedaron en blanco al no entender nada.

-Papá... ¿Que paso aquí? - Pregunto atónito.

-Mujeres....-Fue lo único que respondió Eric.

cuando todo volvió a la calma, se hizo un silencio. Todos frente a la fogata, con la brisa fria moviendo las ramas de los arboles y alimentando el rojo fuego de la fogata

-Así que ¿Estamos en la aldea de los cuidadores? -Un intento por parte de Logan de romper el silencio.

-Si y no- La expresión de Megan no se podía definir por el juego de sombras en su rostro -Hay muchas de nuestras aldeas esparcidas por todos los reinos.

-¿Todos son humanos?- Pregunto Margareth interesándose por la conversación.

-No todos lo son- Esta vez no respondió Megan, sino Eric- Alguno formaron un pacto más profundo con las bestias, que tomaron su apariencia.

-¿Quieres decir que ellos eran humanos? - Pregunto Logan señalando a los lobos que al ver que los señalaban alzaron sus orejas.

-No, ellos son solo compañeros de caza de los cuidadores- Dijo Eric mientras movía la leña de la fogata con una rama.

La vista de Logan se fijo en la fogata mientras que Eric tanteaba las llamas. Cuando de repente algo capto su atención, las piedras que hacían un círculo alrededor del fuego, tenían una capa verde fangosa y algunos tenían un aspecto como si alguien lo hubiese raspado.

¿Verde? ¿rocas raspadas? ¿liquido fangoso? Logan se estaba esperando lo peor.

-La.... La medicina que nos diste.... No tiene nada que ver con eso ¿verdad? - pregunto aterrorizado señalando las rocas.

Con una pequeña risa ahogada de Eric y una muy leve sonrisa de Megan, las dudas de Logan se aclararon y el rostro de Margareth palideció.

-Pero que...- un ruido procedente de la maleza interrumpió a Margareth

De unos pequeños arbustos salieron los dos hombres que antes estaban sentados en la fogata y seguidos de ellos, venían dos personas mas.

-Veo que ya están mejor- Hablo el más pequeño de los cuatro hombres, el cual llevaba una especie de bastón artesanal y una enorme toga que cubría sus brazos- Espero que la pequeña Megan los haya tratado bien.

-Abuelo ¿Hallaron algo? - Pregunto Megan ocultando un leve sonrojo. Logan se dio cuenta de eso, pero a su vez en su cabeza surgió otra pregunta ¿Qué hacia mirándola?.

-Hallamos un rastro pero era muy difícil seguir aun con los lobos - Se lamento un hombre mientras caminaba hacia adelante, dejando ver su cara con la luz de la fogata- Si en realidad son Bhardos como dicen, pues saben esconder su rastro muy bien- Termino el hombre, sentándose en el piso con gesto de cansancio.

-¿Por qué no te llevaste a Lyra? - Pregunto Megan y el lobo blanco a sus pies alzo la cabeza- Ella es la mejor cazadora de todos los lobos.

-Esa loba solo te hace caso a ti y tu no quisiste venir con nosotros- Solto tajante uno de los hombres.

-Al menos preséntate y presenta a los demás antes de pelear con mi nieta- pidió tranquilamente el anciano dando un fuerte golpe al suelo con su bastón -Mi nombre es Perseo y ustedes deben ser Logan, hijo de Eric y Scarlet- Al escuchar el nombre de su madre, Logan recordo que tenía una conversación pendiente con su padre- Y tu debes ser Margareth, hija de Gregor y mary ¿me equivoco?.

-¿Conoce a mis padres/a mi madre? - Logan y Margareth hablaron a la vez provocando una breve burla entre los dos últimos hombre, los cuales no se les veía el rostro ya que la luz del fuego no los alcanzaba.

-Por supuesto, todos en Zore son mis grandes amigos, tu padre y Roland fueron mis discípulos en la espada cuando eran jóvenes- Pronuncio el nombre de Roland con mucho cariño a pesar de su traición- Y tus padres hacen el mejor pastel que he probado en mi vida- Comento con mucha alegria.

Se hizo un silencio profundo. La mirada de Eric y la de Perseo se encontraba perdida en el fuego, como si quisieran quemar un sentimiento.

El carraspeo de una voz masculina llamo la atención de todos- Mi nombre es Aquiles y ellos son Kaiser y Raiser-Los dos hombres dieron un paso al frente. La luz del fuego dejo ver sus rostros. Eran exactamente iguales con la diferencia de algo muy peculiar, sus ojos eran iguales y a la vez distintos. El ojo derecho de uno era verde y el del otro, era dorado mientras que el ojo izquierdo de uno era dorado y el del otro era verde.

Logan presto mucha atención a los rostros de los que parecían ser hermanos hasta que se dio cuenta que los dos lo estaban mirando con ojos profundos.

-Somos Kaiser y Raiser- Se presentaron al mismo tiempo sin apartar la vista de Logan- Hicimos un pacto con la bestia Géminis y nos bendijo con su poder.

La manera en que los dos hablaban a la vez era aterradora... o al menos eso pensó Margareth.

-¿Dónde están los demás? - pregunto Megan ignorando a los gemelos.

-Algunos siguen buscando a Roland o algún Bhardo mientras que otros se dirigen a las
otras aldeas más grandes de cuidadores- Respondió Aquiles.

Perseo golpeo el suelo con su bastón antes de hablar, tal vez lo hacía siempre que quisiera hablar- Deben tener hambre, vayamos a mi tienda- Ofreció- es bueno verte de nuevo Eric.

-Lo mismo digo, maestro Perseo- respondio Eric tensando sus hombros.

Y como si fuese un desfile en honor a Silvye, siguieron a Perseo hasta su tienda. Todos menos Aquiles y los gemelos. Margareth agradeció que esos hermanos no los siguieran.

El nombre Perseo hacía eco en la mente de Logan pero no sabía el porque.

Al entrar en la tienda, observaron que al contrario de la tienda donde habían despertado, esta tenia una muy gruesa capa de lana en el suelo y era mucho mas espaciosa. En las esquinas habían pequeñas mesas con velas y amuletos de todo tipo que a Logan le dio curiosidad de tocar pero Megan lo detuvo con una mirada que decía "ni lo pienses".

Al pasar un rato, Aquiles pidió permiso para entrar a la tienda, se abrió paso con los gemelos y cada uno llevaba un misterioso cuenco que le hacía traer malos recuerdos: la sorprendente velocidad de Megan y la horrible medicina. Esta vez los cuencos tenían una especie de sopa que parecía tener buena pinta.

Comieron mientras Perseo y Eric hablaban sobre viejos tiempos. Al terminar de comer, fueron a la tienda de antes y Margareth cayó dormida al instante al igual que Eric. Logan se encontraba viendo al techo de la tienda pensando en todo lo que había pasado ese día. Desde la traición de Roland hasta el encontrar el brazalete. Con todo lo que había pasado, se olvidó que aún lo tenía. Lo examino durante largos minutos ya que no entendía que hacia eso en su casa.

Los minutos se convirtieron en horas y Logan decidió salir a respirar aire fresco y observar las estrellas. Al salir, dirigió su mirada al cielo y camino hacia el lugar donde aún estaba la fogata. Al bajar la mirada, se encontró con una persona sentada cerca del fuego con los ojos cerrados, era Megan. Logan tenia la sospecha de que ella era rara, pero el dormir afuera, al lado de una fogata, completamente sola después de un ataque Bhardo, no era algo muy inteligente.

Logan volteo hacia todas las direcciones y no encontró ni un solo lobo, lo cual le pareció extraño ya que horas atrás, la aldea estaba llena de ellos. Se aproximó al fuego y se sentó frente a Megan la cual abrió los ojos de golpe y se llevo las manos al cinturón donde ahora llevaba dos espadas curvas.

-Wow tranquila- Intento calmarla alzando sus manos- No le dire a nadie que te dormiste mientras vigilabas- Solto en broma.

-Creo que no hace falta recordarte quien te cerro la boca e hizo que te hicieras en los pantalones- Solto Megan estirando sus brazos y dando un bostezo al cielo.

-Eso era esa extraña medicina - se defendió Logan con un rubor en su rostro.

-Como digas- Respondió Megan sin darle importancia- No deberías estar despierto.

-No puedo dormir- Logan estaba observando directamente al rostro de Megan al igual que ella examinaba el de Logan -¿Por qué tus ojos son rojos? - Pregunto para después caer en cuenta de que había estado mirando fijamente a Megan a los ojos.

-Un antepasado, Salem, durante la guerra contra los Bhardos, hizo un pacto con el señor de los lobos, Phenerix- Mientras Megan hablaba los ojos de Logan se habrían cada vez mas.

-¡¿Tu antepasado conoció e hizo un pacto con Phenerix?! .

-Así es. Solo que el pacto no lo involucraba solo a el- Megan agarro una ramita y empezó a darse golpecitos en la pierna- Salem hizo ese pacto para que su familia y descendientes tuviesen la bendición de los lobos -Lanzo la ramita al fuego- Tenemos fuerza, una sorprendente velocidad y podemos ver bien en la noche. Lo único que Phenerix tomo de nosotros es nuestro color de ojos. Para que así solo pudiésemos relacionar con los de nuestra familia ya que la mayoría temen a nuestros ojos rojos.

-Yo no te temo- Soltó Logan sin pensar y Megan volteo su mirada hasta el- Digo, me da miedo tu velocidad y tu fuerza, pero no tus ojos- Dijo Logan arreglándolo todo.

-Mi padre solía decirme lo mismo- Dijo con tristeza y Logan se dio cuenta de ello, por lo que decidió preguntar.

-¿Tu padre no tenía los ojos rojos? -Pregunto Logan.

-No, el pacto solo se aplica en las mujeres de la familia. Tal y como lo pidió Salem.

-¿Salem era una chica?.

-Claro, ¿cuantos chicos conoces que se llamen Salem?.

-De hecho, no conozco a nadie que se llame salem- bromeo Logan y Megan sonrio.

-Ve a dormir- Ofreció Megan- Es tarde y necesitas descansar- finalizo levantándose, apagando la fogata y perdiéndose en la oscuridad.

Logan se quedó solo en la oscuridad, se levantó y se dirigió a la tienda. Se recostó y se sumió en un sueño profundo.

*Logan estaba en medio de una pradera con el sol justo sobre su cabeza. Delante de el había una colosal sombra, la cual Logan no pudo ver bien.

-Veo que conseguiste mi Catalyst... es una sorpresa que vuelva a tener dueño- Dijo la sombra misteriosa con una voz cavernosa.

-¿Quién eres? ¿de que hablas? - Pregunto Logan mientras el brazalete en su brazo emitía un haz de luz cegador.

-Mi nombre es Bhor- La luz cegadora ya no dejaba ver nada a Logan- Pero me conocen como El Dragon Del Sol, El Uno Victorioso.

todo se sumió en la luz hasta llegar a una completa oscuridad.

algo llamo la atención de Logan: un fuerte olor a cenizas y una sensación de calor abrasadora.

Foto de mi autoria, tomada con un Samsung S3 mini