El Nuevo dilema de los Venezolanos
A todas las sociedades les llega el momento de afrontar la dificultad, la crisis, o lo que es igual; el impulso previo a su desarrollo. Tiempos en los que afloran las peores cosas a ser limpiadas y se desarrolla el caracter y los valores y principios necesarios para catapultar a aquellos que quieren cambiar y avanzar hacia nuevos horizontes.
El Panorama del Venezolano ante sí y ante su futuro.
En Venezuela mientras unos dicen que estamos frente a una guerra de tercera generación por parte de un enemigo externo y otros afirman que tan solo estamos ante los efectos de un sistema político retrogado; La realidad es que independientemente de la razón (o de cuanto grado de validéz conjunta tenga cada una de estas afirmaciones) estamos sufriendo los mismos efectos de una nación que sufre una guerra.
Esto ha despertado el genio de muchos; en unos para bien, y en otros para mal. Tener el sustento en este tiempo para muchos ahora mismo, es algo que implica una habilidad o astucia extra a lo normal.
Nuestro pensar: Como era antes, como es ahora.
Antes el dilema era: ¿En qué trabajaré? ¿Como conseguiré un buen empleo que me guste? ¿Me dedico a estudiar o me lanzo a ganar dinero? ¿Profesional? ¿Comerciante? ¿Empresario? ¿Informal?. Hoy todas esas cuestiones han quedado relegadas a un segundo plano, porque aún con el empleo soñado, probablemente no alcanzará el salario para cubrir lo más elemental de la comida ¿y que queda para lo demás? o si se tiene una empresa o negocio los riezgos de quiebra por perdidas constantes harán tambalear profundamente la economía de la persona.
En este punto comienza el dilema nuevo para los Venezolanos ¿Me quedo en el país? ¿Me voy? Si me quedo ¿Como puedo lograr mis metas o al menos sostener a mi familia? Si me voy ¿A donde voy? ¿De qué viviré en ese lugar? ¿Ejerceré mi profesión? ¿Seré informal? ¿Que posibilidades tengo? ¿Como haré con mi familia? ¿Los puedo llevar? ¿Vendo todo? Etc.
No importa que una persona haya decidido no irse, igual la enfrentó el dilema de irse o no; o lo ha enfrentado un familiar o amigo cercano. El Venezolano que no ha tenido que establecer una postura a favor o en rechazo (o cualquiera de sus matices) con respecto a este asunto, es porque probablemente vive en un sitio aislado de los efectos de la situación actual.
A cada quien su rol: todos seremos necesarios.
Una cosa es cierta a pesar de todo; sea cual sea la postura y las decisiones de cada quien con respecto a este nuevo dilema Venezolano; Quien se quede llevará la carga de limpiar la tierra y mantenerla abonada y preparada a la espera de la lluvia del cielo; y los que se vayan traerán consigo la mejor semilla para sembrar en la tierra que fluye leche y miel: ¡Venezuela!
Fuente de Imagen: Pixabay
Muy bueno tu post amigo me agrado bastante, gracias por compartirlo @nanowins77
Me contenta mucho que le agradaran esta y las otras las publicaciones por las que pasó, amigo. Muchas gracias por leerme y comentarme.