La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda, y cómo la recuerda para contarla. Gabriel García Márquez-Nobel de Literatura

Este mensaje de mi amado nobel de literatura, tiene mucho sentido. Muchas veces hacemos énfasis en recordar aquellas cosas que nos han marcado de manera negativa. De esta manera solo conseguimos reforzar los resentimientos y producir hormonas del envejecimiento que arrugan la piel y el corazón. ¿Esto es lo que realmente deseamos? Creo que no, en general todos estamos tratando de pescar la felicidad en este charco de la vida. Siendo así, será mejor intentar aplicar la resta o sustracción a estos recuerdos.

Cuando recordamos bellos momentos, sonreímos y experimentamos felicidad; las hormonas de la juventud se activan, el alma se pone tersa, nuestros genes comienzan a transcribir y replicar juventud. Sí, será mejor aplicar aquí la multiplicación de estos recuerdos.

Dicen que deberíamos vivir en el aquí y ahora, sin embargo nuestra vida parece un transcurrir constante entre el pasado, el ahora y el futuro. Si acostumbramos hacer estos viajes al pasado con mucha frecuencia, y vacacionamos ahí por largo tiempo; coincido con García Márquez, será mejor recordar aquello que te hace feliz.

Tú eliges cómo escribes el libro de tu vida. Tú eliges con qué colores pintas el cuadro de tu vida.

Felices recuerdos,