Un muchacho le decía a otro:

• Oye pedro, ¿te gustaría ir a una fiesta esta noche?
• Va a estar buena no te la puedes perder.
• Es el cumpleaños de nuestro amigo Roberto y también va a estar ahí la chica que te gusta.

Pedro dice:

• No se diga más, ahí estaré, cuenta conmigo mi pana, en eso pedro se va hasta su casa a darse una ducha para luego alistar su moto e irse a la fiesta.

Unas horas más tardes…

Al llegar Pedro a la fiesta pudo observar que había mucha gente extraña, eso sí había muy buena música, el mejor dj se encontraba ahí.

Al entrar se encontró con sus amigos y se dispuso a beber a la par de ellos, eso fue lo peor que Pedro pudo hacer ya que el no era bebedor y los amigos tenían malas mañas.

Los tragos venían de un lado y de otro, y casi todos iban hacia Pedro, ya pedro después de un rato estaba algo mareado, pero aún se mantenía en pie.

En ese momento que pedro se acerca hasta la barra nuevamente a pedir un trago, viene llegando la chica que lo tiene enamorado desde hace muchos años atrás, es una mujer llamativa voluptuosa y muy simpática, ella también vio a pedro y le guiño un ojo al mismo tiempo que le decía:

• Hola pedrito que bueno que viniste, al fin encontré a alguien conocido para bailar toda la noche.

El sueño de pedro se hacia realidad, ese era su momento, Pedro estaba flotando de felicidad y sin darse cuenta se orino encima vaya vergüenza la que pedro generaba.

Nadie lo noto en vista de que tenía un pantalón negro y el lugar era algo oscuro, por lo cual fue hasta el baño, en donde se tuvo quitar el pantalón, lavarlo y esperar que se secara con el secador de manos.

Después de 2 horas logra Pedro salir del baño, evidentemente ahora estaba algo más ebrio que antes, cuando fue a buscar a la chica de sus sueños, la vio con otro hombre besándose, por lo cual pedro exploto en rabia y se lanzo 2 tragos secos de ron puro y se dispuso a largarse del lugar.

Al retirarse bien borracho, tambaleándose de un lado a otro, se consigue con el vigilante del local quien le pregunta: mire señor ¿Dónde dejo su vehículo?, en ese momento pedro sin ver intenta señalar con su mano estirándola hacia el lado derecho, pero sin ver y también sin querer introdujo su mano en un ventilador con aspas metálicas.

Este pequeño gran accidente prácticamente rebano parte de su dedo meñique salpicando de sangre al vigilante y aun así Pedro estaba tan ebrio que no sintió dolor, el vigilante rápidamente llamo a una ambulancia en donde trasladaron a Pedro hasta el hospital.

Ese justo momento…

Yo me encontraba muy cansado, estaba saliendo de una gran cirugía a las 2:00 am, cuando de pronto se abre el ascensor y entra la residente de guardia con un paciente, el cual había presentado una amputación traumática del dedo meñique y una que otra lesión en los otros dedos.

Mientras metían a Pedro al quirófano, iba pasando una enfermera algo nalgona y pedro le dio una gran nalgada con la mano lesionada dejando una gran huella de sangre en una de sus grandes nalgas, la enfermera pego un grito y se sonrojo.

Yo, sinceramente no podía creer lo que veía, el nivel de abuso de Pedro era una locura, ya estando acostado en la cama de quirófano pedro solo decía:

• Doc mire doccccc una preguntaaaa ¿los deditos van al cielo?
• Porque si no van al cielo creo que el culo de esa enfermera me comió un dedo.

En ese momento no me pude aguantar y exploté de la risa, pues era lo mas ocurrente que alguien había dicho en quirófano en tantos años, sin duda alguna este tal Pedro era un paciente muy especial.

En eso inicio la cirugía, la cual tan solo duro unos 30 minutos, tuve que realizar la reconstrucción de sus dedos, logrando obtener un excelente resultado estético, así como también funcional.

Pedro al despertar ya no se encontraba ebrio, pero se sentía muy avergonzado por la actitud que él había tenido en ese estado lugar, enfermeras y médicos le había revelado su increíble comportamiento acompañados de mucha risa.

En la actualidad pedro se encuentra muy bien y se ha convertido en uno de nuestros amigos mas preciados en el hospital.

La moraleja de esto es que el alcohol y las fiestas quitan hasta el dolor mas fuerte, como por ejemplo el de un dedo amputado, esta historia tiene un poco de todo.