LA DULCE PALABRA QUE NECESITAMOS

Fui criada bajo un ambiente poco cariñoso y he tenido que luchar arduamente para tratar con una voz dulce a mis hijas, es de verdad un verdadero reto para mi hablar con palabras apacibles, pero se puede lograr.

Pido a Dios cada día! que guarde la puerta de mis labios, pues la lengua es un pequeño instrumento que puede causar un incendio en un gran bosque dice Santiago 3:5 en las santas escrituras.

Alguna vez nos hemos preguntado como cambiaríamos nuestra relación familiar con tan solo un poco de freno a nuestra lengua, normalmente podemos ser cariñosos y hablar de igual manera si estamos contentos. Pero si estamos en medio de una discusión acalorada, en medio de unos sentimientos de ira es diferente.

ALLI ESTA NUESTRA LUCHA........

En tratar de que en esos momentos airados nuestra lengua mantenga un mínimo de respeto al hablar, no es fácil pero es un reto de crecimiento, creo que si logras dominar tus palabras en estos momentos difíciles te habrás dominado a ti mismo.
Imagina el logro que significa luchar contigo y ademas de eso ganar, el sentimiento de victoria que se siente es inimaginable.

Pero como el deportista se entrena cada día para lograr su mejor tiempo, así debemos esforzarnos en mejorar cada día nuestra manera de hablar, intentar ser menos ásperos, dulcificar nuestras respuestas no solamente con familiares, esposos, esposas, hijos e hijas, sino también en nuestros trabajos, en el transito, en las filas etc.

Definitivamente haciendo pequeños y grandes cambios en nosotros y venciéndonos a nosotros mismos en nuestras propias luchas conseguiremos grandes sociedades, grandes países, seremos diferentes, anímate! hazlo tu también, cada uno de nosotros tiene una cuota de dominio propio, "Self-control" que debemos cultivar y entrenarnos cada día en romper nuestros propios récords.

Gracias a la comunidad Steemit por permitirme compartir mis ideas, pretendo aportar un pequeño granito de arena para el crecer personal primeramente mio y si ustedes me lo permiten para ustedes también, pasen un muy feliz día.

Los tiempos son duros la corriente de este sistema nos lleva, pero detengámonos un momento y agradezcamos a Dios por cada día que nos da de vida, para compartirla amorosamente con los demás.