Demasiadas sombras dolorosas
que lo alejan de su triste presente,
aferrándolo a ese pasado que lo arrastra,
lo subyuga y lo envuelve en forma latente.

Fue en ese pasado que aprendió a amar, a cuidar, a ser...
y si el presente es tan frío, tan desolador...
¿es malo querer pertenecer
a la época donde conoció el amor?

«Debo seguir adelante, debo evolucionar».
Solía repetirse día tras día
y al volver a su realidad vacía,
solo quería gritar.

Le tocó sobrevivir en un mundo hostil;
sus ojos perdieron el brillo y la alegría,
se sumergió en el alcohol
quien es ahora, su única compañía.

Ahora solo le queda el alma vacía;
se levanta, bebe y así transcurren sus días.
Llora siempre con desolación,
botella tras botella... no pensar, es mejor.

Fotografía tomada con mi Cámara Nikon D3100

Fuente Única