Historia real "A recoger el campamento"

Muy buenos días ¿qué tal estáis? Como sabréis o os habéis imaginado estoy de vacaciones unos días. Voy con mi amor en autocaravana, y encontramos un lugar ideal para quedarnos. Alejado y en la naturaleza, sin molestar a nadie. Llegamos hace 5 días y todo perfecto sin problemas. El primer  día hicimos nuestro propio chillout, un porche encantador, os voy a dejar unas fotos para que os hagais una idea.

El resto de los días dejabamos todo montado, nos ibamos fuera y ningún problema, nadie nos robaba nada y no pasaba nada, todo genial. La sorpresa fue esta mañana, cuando a las 9 de la mañana nos pegan a la puerta al grito de ¡policia, abra la puerta!. (Hay que tener en cuenta que estamos de  vacaciones y nos fuimos a dormir a las 5 de la mañana, así que imaginaos que cara podríamos tener)

Y nos dicen los señores agentes, que tenemos que levantar el chiringuito. Que no podemos estar ahí, que esto es el campo y que el campo al parecer hay que mantenerlo vacio. Que desmontemos todo y nos vayamos, que nos dejan un par de horas para quitarlo todo, para que nos de tiempo a desayunar. (Aquí estoy tranquilamente 3 horas después escribiendo el post).

Pero si, esto me indigna. ¿Por qué? Es el campo, es la naturaleza, esta lejos de la ciudad, esta perfecto para estar aquí. Para que este mundo tiene naturaleza, para que se disfrute ¿no? siempre respetandola y cuidandola, pero es la naturaleza, y os juro que los arboles a veces parece que me miran diciendo "estamos tristes, nadie viene a vernos" Porque estamos como hormigas en bloques de hormigón en la ciudad contaminando este "precioso" planeta.

¡Que leches! La ley municipal no me deja estar en el campo, la ley nacional no me deja estar en el campo, la ley de la unión europea no me deja estar en el campo. Y la LEY NATURAL del mundo entero, de la naturaleza, del ser humano, la ley principia de verdad, eso si me deja estar en el campo.

De hecho, lo primero que hice cuando llegué aquí, fue ponerme unos guantes, coger una bolsa de basura y limpiar todo lo que había a mi alrededor (que otra gente puerca) había dejado. Pero bueno yo no soy esa gente puerca, yo estoy respetando el campo y estoy cuidandolo, no veo lógico que no pueda estar aquí. Esta tierra que piso no es de nadie, de ningún ayuntamiento, de ningún estado, y de nada de eso. Esta tierra es de todos. 

En fin, ¿qué opinais?

Saludos y abrazos.