Estar enamorados no es el mejor estado de la vida, el mejor estado es estar tranquilos

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Con el pasar de los años, descubrí que el mejor estado de la vida no es estar enamorados, sino estar tranquilos. Solo cuando una persona logra hallar ese equilibrio interior donde nada sobra y nada falta, es cuando se siente más plena que nunca. El amor puede aparecer entonces si así lo quiere, aunque no es una necesidad obligada.

Me parece muy curioso como la mayoría de nosotros solo pensamos como objetivo primordial el encontrar a nuestra media naranja o mejor dicho a nuestra pareja perfecta.

Cada vez surgen mas y mas aplicaciones para facilitarnos esas búsquedas. Tampoco dejare de mencionar la infinidad de programas televisivos orientados hacia el mismo fin y de esta manera buscamos y buscamos sin antes haber hecho un viaje imprescindible: el del autoconocimiento.

El hecho de que nosotros mismos no nos embarquemos en el viaje hacia nuestro interior para profundizar en nuestras necesidades, hace que a veces terminemos eligiendo a las personas menos indicadas. Relaciones pasajeras que quedan inscritas en la soledad de nuestras almohadas, tan harta ya de lagrimas sofocadas y sueños rotos. Tanto así que son muchísimas las personas que pasan la mayor parte de su vida de corazón en corazón, o como digo yo: de piedra en piedra, albergando en sus mentes y almas las horrendas decepciones, amarguras y tristes desencantos.

En este punto de nuestras vidas, solo tenemos dos opciones: Mirar hacia el frente o mirar hacia atrás. Si hacemos esto de la mano de la sabiduría y experiencia tomaremos el camino correcto: el del interior.

Aquí es donde debemos poner en orden el cóctel de nuestras emociones para encontrar el perfecto equilibrio.

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El mejor estado de la vida es estar tranquilos

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La tranquilidad es el estado de calma, serenidad o paz, que experimenta una determinada persona o individuo. La real academia define la palabra como la cualidad de tranquilo; otras fuentes exponen la tranquilidad como la ausencia de angustia, miedo, culpa o dolor.

La tranquilidad no es ni mucho menos ausencia de emociones. Tampoco implica renuncia alguna al amor o a esa pasión que nos dignifica, esa que nos da alas y también raíces.La persona tranquila no evita ninguna de estas dimensiones, pero las ve desde esa perspectiva donde uno sabe muy bien dónde están los límites, dónde esa templanza que como un faro en la noche alumbra nuestra paz interior.

Vivimos en un mundo donde se nos insta a buscar pareja como si de este modo pudiéramos alcanzár por fin la ansiada autorrealización. Frases como “cuando tenga novia asentará la cabeza” o “todas tus penas se aliviarán cuando encuentres a tu hombre ideal”, no hacen más que anular de forma constante nuestra identidad para erigir una idealización absolutista y errónea del amor.

El mejor estado del ser humano no es pues amar hasta quedar anulado. No es darlo todo hasta que nuestros derechos vitales queden difuminados solo por ese miedo insondable a estar solos. El mejor estado es estar tranquilos, con una adecuada armonía interior donde no quede espacio para los vacíos, para los apegos desesperados o las idealizaciones imposibles.

Porque el amor, por mucho que nos digan, no siempre lo justifica todo. No si implica abandonarnos a nosotros mismos.

¿Como podemos hallar calma y tranquilidad interior?

Es muy facil...

1.- Céntrate en lo que verdaderamente quieres.
2.- Eligete a ti primero, mil veces.
3.- Conecta con energías positivas.
4.-No tengas miedo y si lo tienes lucha contra el y supéralo.
5.-Perdona, cree, y confía.
6.-Toma unos minutos para respirar, el respirar te hará encontrarte con lo mas profundo de tu ser.

Recuerda que las personas en las que cuyo corazón se respira equilibrio y en su mente y cuerpo habita la tranquilidad no ven el amor como una necesidad.

¡Gracias por haber tomado el tiempo de leer todo esto!

Quise de alguna forma expresar mis pensamientos y creo que me inspire porque escribí bastante. Solo espero que les sirva de ayuda.

-Se despide, lulú.