CHOCOLATE CALIENTE PARA UN ALMA FRIA ( Poema en prosa)

Tomando una taza de chocolate humeante; estoy aquí
muda y recordando palabras que se perdieron ahogadas;
solitaria, con estos brazos huérfanos de tu calor...

Acariciando cicatrices y heridas aún abiertas,
repaso pensamientos viajeros sin destino seguro
y frente a mí veo pasar la vida; vida que confieso;
de ella me escondo, ignorándola y dejándola pasar...

Siento calor; se aviva un poco mi corazón congelado
mientras llueve afuera a cántaros, yo aquí lloró mis penas.

Marchitado; intenta florecer el árbol de la vida,
revive germinando lentamente la señora esperanza,
se calienta mi alma y tímidamente despunta un nuevo día...