FRIDA: Vida y obra marcada por el dolor

Frida Kahlo, cuyo verdadero nombre es Magdalena Carmen Frida Kahlo, nació en México, el 6 de julio de 1907. Fue una mujer de frágil apariencia, pero de una gran fortaleza emocional, a pesar de las secuelas que dejó en ella no solo la poliomielitis padecida a los seis años, sino también un accidente sufrido durante su adolescencia en un tranvía, donde se fracturó la columna vertebral, y que hizo que le practicaran más de treinta operaciones quirúrgicas a lo largo de su vida. No conforme con esto, en su empeño por ser madre(a pesar de su fragilidad y sus limitaciones físicas) se embarazó sufriendo varios abortos.

Su existencia, como puede apreciarse, siempre giró en torno al dolor, el cual trató de dominar, aunque no siempre lo logró, intentando en varias oportunidades acabar con su vida. Sin embargo, logró construir una particular forma de ser y de ver al mundo, que dejó plasmado en cada uno de sus cuadros y escritos. En sus pinturas, se pueden aprecian heridas abiertas, sangre, fetos, camas, aparatos ortopédicos, corazones heridos; imágenes que son el reflejo de su propia vida, tratando de transmitir con ellas lo que sentía y padecía en su interior...

Carlos Fuentes, por su parte la llega a describir de esta manera:

“Una Cleopatra quebrada que escondía su cuerpo torturado […] bajo los lujos espectaculares de las campesinas mexicanas”. Los encajes, los listones, las trenzas, los huipiles, todo eso era Frida…

Su vida amorosa también fue accidentada, dolorosa e intensa; Kahlo se casa con el muralista Diego Rivera en 1929, siendo está una relación tóxica e inestable, cargada de traiciones e infidelidades. Rivera le fue infiel con su propia hermana Cristina, situación que la devastó, y que fue la causa de una fuerte depresión y de su divorcio. Algunos años después vuelven a encontrarse y se casan nuevamente, convencidos de que no pueden estar separados, pero deciden mantener una relación abierta en la que cada uno podría tener otras parejas. Frida por su parte, tuvo amoríos no sólo con hombres, sino, también, con mujeres y entre sus amantes se mencionan a León Trotsky, José Bartolí, Nickolas Muray, Chavela Vargas y Jaqueline Lamba. Pero su único y verdadero amor siempre fue Diego. Ante esta situación se hacia la siguiente interrogante:

¿Cuál es mi camino? ¿Esperarte? ¿Olvidarte? ¿Hacer lo que tú haces, ir de los brazos de uno y de otro, hoy dormir con alguien y mañana con otro diferente?