Caótico Transporte Público en Venezuela

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En Venezuela, actualmente se ha convertido un gran problema la movilidad. 

Las personas han tenido que salir de sus hogares alrededor de las 6:00 - 6:30 a.m a buscar la forma de poder tomar el transporte público, ya que ahora se estos se han abarrotado de personas hasta el punto de (aunque es peligroso y hasta ilegal) llevar personas en las puertas, llevarlas guindadas, intentado sostenerse de otros, entre otros. 

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Para las personas que entran a la tercera edad es peor, ya que como se establece en la Gaceta Oficial 6.221, específicamente en su artículo 10, donde establece que estos y discapacitados pagarán un 50 % menos en el pasaje. Por ese motivo y por problemas económicos al momento de encontrar algún repuesto para los buses, para pagar la gasolina, para que les quede algo para la alimentación de los conductores, es que tanto a los de tercera edad como a los estudiantes.

Venezuela posee muchos acuerdos con China llegando a deberles hasta millones de dolares, deudas que persistirán durante mucho tiempo. En uno de sus acuerdos, han enviado a Venezuela transportes públicos "Yutong" con la capacidad desde 25, 34 y 54 puestos. Por supuesto no siendo suficientes lugares y dejando menos ganancias para las unidades, los conductores aceptan más personas en cada unidad asignada, y aún con tener dichas capacidades y poseer una planta con producción bimensual de 200 buses, no llega a ser suficiente para la sobre población que sufre el país. 

Llevando el tema a lo más micro, en Aragua, Maracay se encuentran varias líneas de buses en la cuales algunas llevan el reglamento y solo aceptan pasajeros por puesto y el resto como ya les conté, de pie. En urbanizaciones como Caña de Azúcar, El Limón y La Candelaria siendo unos de los más antiguos se presentan hasta la falta de transporte, las líneas han llegado a reducirse hasta un 50 %. Ahora mismo, en la Urbanización La Candelaria, Maracay, no hay más que las líneas "Yutong" para las cuales hay que pasar de entre 2 o más horas esperando en una cola para poder montarse y llegar a su destino.