LA NUEVA ECONOMÍA DEL MEME

Internet es el nuevo ocio. Entretenimiento y diversión tejen redes en la World Wide Web, dejando también espacio a la cultura.

Como una mezcla de todo lo anterior, el concepto de mente se ha adueñado de las mentes más jóvenes. Influyendo en el pensamiento a través de la risa. Cambiando ideas a través de carcajadas.

4chan, Reddit…y otros muchos, son lugares donde los millenials interactúan y cuentan sus experiencias. En estas plataformas, uno puede dar un buen puntapié a la censura y tratar temas silenciados en el debate público.

En esta suma de procesos, el meme juega un papel cada vez más importante.

Icono de lo antes descrito, existe un meme simbólico del nuevo mundo digital. Una rana divertida y capciosa, provocadora de todo aquel que divise su silueta. Ese anfibio se llama Pepe, responsable según algunos de la victoria de Trump y también-porque no- de alentar el odio en las redes sociales. Bajo su verde piel, subyacen una serie de debates reprimidos; las ganas de patear a un establishment que ha olvidado como divertirse.

Y por supuesto, esto genera dinero.

Las criptomonedas han visto, como el amor de los fanáticos por Pepe ha hecho despegar un proyecto. La moneda PepeCash, emplea sus fondos en acumular coleccionables, posando lujuriosa para sus granudos y anónimos fans.
Hay pues, quiénes gastar sus dólares en comprar estos coleccionables digitales.

En conclusión, aunque nos cueste creerlo hay una nueva economía en marcha: un mundo donde uno intercambia sus cripto por Pepes…y da así a luz a una nueva serie de intercambios económicos.