UNA OPORTUNIDAD DE VIDA

Hoy les traigo la historia sobre Canela, una cachorra que llegó a mi vida el 22 de junio de 2017.

No sé qué edad tenía ese día, pero no pasaba los dos meses.

Recuerdo que salí a hacer unas diligencias en la mañana y vi a dos cachorros, uno de pelaje negro y otro de pelaje dorado, acostados en la acera frente a la casa de un vecino, en la sombra (el sol estaba implacable) y pensé: que maldad abandonar a unos seres tan indefensos.

Cuando regresé, como dos horas más tarde, no los vi. Sentí alegría porque pensé que habían conseguido un hogar.
Por la tarde volví a salir y ahí estaban de nuevo, por lo que se me ocurrió que tal vez más temprano, cuando no los vi, estarían buscando algo de comer por sus propios medios, así que me dije: cuando vuelva les daré algo de comer

Al regresar solo vi al cachorro negro y busqué al otro pero no lo encontré, así que decidí llevarme al que vi hasta mi casa, pero como tengo más perros, lo dejé afuera esperando, porque no quería que se asustara con los otros canes de mi casa.

Cuando salgo, con una taza de comida y otra de agua, no estaba el perrito. Corrí hasta el final de la calle y en la esquina me topo con el cachorro dorado, y le dije: ¿dónde está tu hermano? Bueno, ven, hoy es tu día de suerte

Este, sí, suelo hablar con los animales. Y algunas veces con las plantas jajaja.

Continuando con la historia, me senté en la acera frente a mi casa, a esperar que comiera, y mientras lo hacía me di cuenta de la cantidad de ronchas que tenía en la espalda y que si seguía con ese estilo de vida, no iba a durar mucho.

Mi mamá salió y me dijo: ni se te ocurra, ya tenemos tres perras y no vamos a poder con otra

Me quedé cuidándole en la calle por un tiempo estimado de tres horas, pensando qué podía hacer por su bienestar.

Al final de la tarde, cuando mi hermano regresó del trabajo, nos ve y me dice: ¿y eso?

Entonces le conté lo que había ocurrido durante el día, a lo que me pregunta: ¿es hembra? Porque si es macho no lo podemos meter, recuerda que tenemos tres perras sin esterilizar.

Cuando reviso, para mi sorpresa y alegría, le grito: ¡ES HEMBRA!

Sólo me dijo una palabra: Tráela.

Ya son casi 7 meses desde Canela está con nosotros, ¡y que linda está! Tiene techo, comida y amor, sobre todo, amor de sobra. Y ya no tiene ronchas, se le quitaron al mes :)

Por cierto, mi mamá fue la que le colocó ese nombre, y está encantada con ella :3

Aquí está una foto del día que llegó a la casa. Estaba asustada porque era un ambiente nuevo para ella.

Y ésta es de hoy, 14/01/2018

A veces sólo se necesita un mínimo acto de buena fe para cambiar la vida de estos pequeños indefensos, quienes constantemente sufren de maltrato por parte de personas desalmadas, a las que no les tiembla el pulso para arremeter de distinta forma contra ellos.

El mundo puede ser un mejor lugar para vivir si nos lo proponemos.

Ayudemos a los canes y felinos de las calles, porque ellos no tienen la culpa de la maldad de ciertas personas.

Sólo espero que el cachorro negro haya corrido con la misma suerte de Canela y que esté en un hogar lleno de amor.