Respuestas

Se obtuvo la respuesta, al fin, de la interacción mancomunada de todos los pequeños dispositivos electrónicos, ordenadores personales, smartphones, electrodomésticos controlados por inteligencia artificial remota, cualquier dispositivo a lo largo y ancho del planeta, fue utilizado a un tanto por ciento de su capacidad para obtener un análisis, un indicio de algo que pudiera usarse como guía para afrontar la situación.

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La situación, ya sabéis, incluso los que no están en antecedentes, debido a la vorágine de los últimos tiempos y a pesar del esfuerzo de mentes bien intencionadas de revertir la situación, no había sido posible detener el progresivo y aritmético deterioro de la situación, nuestro planeta, se encontraba al límite de sus recursos, necesitábamos una respuesta en breve, o peligraba nuestra subsistencia como especie.

La respuesta, es que no había respuesta, al menos como entendíamos la respuesta, la salvación a corto plazo y de una forma coherente, sistemática y ordenada de la raza humana. No obstante obtuvimos una serie de consejos encaminados a encontrar una solución satisfactoria a quince, veinte años vista y una serie de medidas a corto plazo, drásticas y dolorosas para alargar en la medida de lo posible, la vida del agónico planeta.

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La medida a largo plazo, para la consecución de una respuesta, fue darwiniana, es decir de la evolución de la especie, se consensuó entre los gobiernos de las distintas partes del mundo, en la medida de lo posible evitar las uniones de pareja de mismo genoma, las relaciones entre personas de mismo sexo quedaron al margen de esta medida, pero la gente que estuviese dispuesta a colaborar, deberían tener uniones con especímenes de otras razas lo más antagónicas posibles, con el fin de la búsqueda mediante combinaciones de un individuo o individuos que tuviesen la evolución mediante cruce de las mutaciones diferenciales, como digo una evolución, un rasgo diferencial que fuese capaz con toda la información disponible de la especie humana de llegar a un fórmula o respuesta para su supervivencia

El proceso, al principio, fue acogido con desconfianza por parte de la población, por gozo, por otros, ya que las estúpidas creencias derivadas del hecho religioso monoteísta que castigaba la promiscuidad fueron abolidas, se trataba de cuanto más mejor, siempre que se diera el hecho diferencial en el genoma, para la búsqueda de la máxima diversidad. No se pusieron limitaciones por razones de edad, aun en los individuos con sus telómeros más cortos e incluso alteraciones a nivel cognitivo derivadas de un deterioro celular de su cerebro, eran empujados a mantener relaciones. Se presumía que la naturaleza, en su búsqueda constante por la pervivencia, sería capaz de mutar, lo dicho, no existían limitaciones en ese aspecto.

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Pasaron los años, no se conseguían avances en ese aspecto, lo individuos que presentaban las características más diferenciales, con posibilidad de salto genético eran educados sin escatimar medios, era una nueva élite, no debían trabajar ni preocuparse de buscar alojamiento, ni ninguna de las preocupaciones y carencias del resto de los mortales, pero nada, el terreno seguía baldío, las respuestas, eran escasas, insuficientes al problema de la irreversible cuenta atrás que había emprendido el amado planeta.

En una vuelta más de esta huida desesperada, se privilegió aún más a estos individuos, con mejores condiciones, incentivando la mezcla entre ellos, todo en un intento cada vez más desesperado de una respuesta, de una solución al enigma de la salvación de la especie. El resto de la humanidad, soportó peores condiciones, sin rechistar, era elegir entre poco o nada, el cortoplacismo se había borrado de la mente de los moradores del Planeta Tierra, había una consciencia cósmica de que una solución de futuro, sólo era posible mediante el sacrificio de muchos.

La situación, comenzó a volverse insostenible, a pesar de todos los privilegios, de toda la información, del volcado de casi la totalidad de los exiguos recursos del planeta en esos individuos privilegiados, las respuestas no llegaban, incluso, empezaba a ser vox populi a pesar de los intentos de camuflar la situación, que se estaban obteniendo retrocesos en los estudios que se llevaban a cabo, las respuestas que se obtenían de esta élite no conducían a nada, ni una espita de esperanza, la desilusión y por ende las revueltas, empezaron a producirse, el asomarse al abismo, trajo caos y entropía.

Apenas restaba un velo de civilización, sostenida ya no por la vana esperanza de una respuesta no, sostenida por el miedo a la poderosa tecnología detrás de los gobiernos corporaciones, en un momento determinado, derivado de los intentos de encontrar una respuesta, se podía saber el cómo el cuándo y el porqué, cuando empezó a llegar un rumor cada vez más insistente, de una solución, nadie sabía pero se organizaron asambleas, se eligieron los miembros jóvenes de mejor talante y condiciones y fueron a explorar, y lo encontraron, una tribu, perdida en el resto de los restos del Amazonas, tribu que actuaban como niños, mancomunados, fuertes, albergaba entre sus miembros la respuesta que para ellos, le dictaba de forma clara la naturaleza, ansiosa, de ser oída.