PERSEVERANCIA

El tema de hoy es la PERSEVERANCIA, por eso quiero compartir esta historia, y espero les sirva de ejemplo.

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Cuando nació la primera hija de Cecilia León, madre soltera, le pidió a su jefe una reducción de horas de trabajo, para poder dedicarle más tiempo a la niña, ésta persona se lo negó, y fue así como inició la historia de Cecilia León, una pequeña empresaria y dueña de su negocio.

“Renuncié y me cuestioné si valdría la pena buscar otro trabajo, y me respondí que no. Ellos también iban a tener el manejo de mi tiempo”. Pero como no podía quedarse sin hacer nada, buscó aprovechar los conocimientos y los contactos de su antiguo trabajo, para abrirse su propio camino en todo el ramo de la informática y la investigación.

De entrada fijó su estrategia: buscar un lugar donde ubicar su “por ahora” único equipo de computación, y así fue, con ayuda de sus familiares y amigos más cercanos, logró iniciarse. Día tras día, y con ganas de seguir adelante, poco a poco más estudiantes, abogados, profesores, y una gran gama de clientes ya sabían de la existencia de éste pequeño negocio. No solo hacía trabajos de transcripción, también realizaba diseños y cursos de informático de nivel básico y avanzado.

Los resultados fueron los mejores en todos los sentidos. No solo que lograba colocar muy bien su negocio, sino que además se encontraba con un trato más directo y cordial, que no podía haber encontrado en su antiguo trabajo.

Después de varios años, ese pequeño negocio de Cecilia tuvo que cambiar de sede a un lugar más grandes, porque ya contaba con más equipos de computación, impresoras, fotocopiadoras; ya no era solo transcribir, diseñar, también era ventas de materiales de papelería en general; lo que empezó con una mesa, una silla y una PC, se convirtió en una Sala Web con 12 equipos.

Y así Cecilia logró con mucho esfuerzo y perseverancia tener un mejor futuro para su familia.

¿Qué les pareció la historia?

Aquí tenemos un claro y típico ejemplo de las personas que se abren camino, con mucha perseverancia y dedicación por sus objetivos. Cecilia León, puede ser cualquiera, que tiene ganas de emprender un negocio o alcanzar una meta en su vida.

Cecilia no se quedó con la sola idea, ni se dedicó a lamentarse ni quejarse por su situación, por el contrario, se armó de valor y confianza en sí misma, para asumir todos los riesgos y dificultades que significa lograr un sueño, hasta alcanzarlo. Seguramente tuvo muchos contratiempos y dificultades en su camino, pero los enfrentó, luchó contra ellos y no perdió la confianza en sí misma. Hoy es una mujer empresaria, exitosa y se siente realizada.

Todos nosotros podemos saborear las mieles del éxito y la realización personal, todos podemos alcanzar nuestras metas y anhelos.

Los resultados mediocres o el fracaso, son el resultado de la falta de voluntad, de carecer de auto confianza y seguridad en nosotros mismos.

Los invito a seguir ese espíritu de Cecilia León. No se dobleguen. Trabajen duro, con empeño por sus metas… y pronto verán los resultados.

Hasta un próximo POST.