La fuerza del pensamiento

Bajo este simple pero complejo concepto nos basamos en proyectarnos, programarnos y planificarnos en las diversas aéreas de nuestras vidas, lo cual nos da un punto de partida hacia lo que queremos realizar,pero siempre dejamos que las diversas modificaciones que nos trae la vida nos impide a realizar o ejecutar esas ideas y cometemos el error común en echar la culpa a otros o simplemente nos ponemos excusas o barreras tales como (hoy no puedo, estoy cansado(a), no tengo tiempo, o la clásica aún hay tiempo de sobra para que apurarme) y comenzamos a prorrogar los planes y la ideas.

También existe el caso en que nosotros mismos nos desanimamos o callamos esa voz interna que nos motiva y solo atendemos a esos sonidos de retraso, perdemos la confianza en nosotros y hasta en las casos más comunes e insignificante (se hace presente la falta de confianza) como solicitar una información, porque pensamos que nos tildaran de tontos o poco inteligente, créeme que pasa (yo solía quedarme sin dicha información antes que me señalen por tonto)

Te digo algo a TI ¡sí! a TI, tu eres el único en poder transformar esas ideas en realidad, en poseer la fuerza y la convicción de ejecutarla, exclama y di que si puedes, tienes la capacidad de ejecución, frases de autosugestión te impulsan a ir creciendo.

La fuerza de un pensamiento no radica en la sostenibilidad de dicha imagen; Sino en la recreación palpable de la misma. Esto se traduce en que puedas tener la idea más increíble pero si solo vive en tu cabeza, esa idea estará postraba en bases de barro y se extinguirá sin ver la luz de la ejecución, no significa que la culmines pero puedes mostrarla en esta palestra de vida.