La política de los imbéciles (Original)

En estos últimos días he estado bastante pensativo, con relación a este tema en particular, aunque debo decir que desde que soy un adolescente me ha interesado todo aquello que involucre la política y la opinión pública, siempre me ha causado interés, por lo cual, soy de esas personas que me gusta estar lo mejor informado posible, y a través de esa lectura informativa, y por lo que he visto por televisión, además de vivir en un país fuertemente politizado, he sacado muchas conclusiones referente a este tema, que me gustaría compartir con ustedes, basándome en mi punto de vista, y de lo que he hablado con otras personas.

La política que suele ser un tema de debate continuo, y donde a muchos no les gusta ejercer ninguna opinión, ya que suele herir susceptibilidades en algunas personas, es para mí un tema fundamental, ya que la mayoría de nosotros vivimos en regímenes presidencialistas, donde mayormente el voto es directo, ahora no solo voy hablar de esta parte del mundo a la que pertenezco, sino que voy hablar en un contexto general, sin importar los sistemas de gobiernos existentes, ni las ideologías políticas, y digo esto porque mi poca experiencia me ha demostrado, que ningún sistema político existente es verdaderamente efectivo, todos de alguna u otra manera son los mismos, pero con diferentes nombres y objetivos.

Como muchos de nosotros sabemos, el político se caracteriza, por su “Don” para influenciar a la opinión pública, es decir al pueblo, y esto de alguna manera es desarrollado a través del tiempo, como decimos algunos: “La práctica hace al maestro”, esta forma de convencer a las personas, de que él o ella son los capacitados para llevar el poder, termina en innumerables veces, cayendo en la demagogia, es decir, en promesas que no van a llegar a cumplir, nosotros los ciudadanos somos conscientes de que esas promesas en muchos casos son falsas, pero por una razón, siempre terminamos votando por las mismas personas, que mantienen un discurso de que ellos son los “Salvadores”, y lamentablemente terminamos cayendo en las mentiras de los políticos de turno, Nicolás Maquiavélico decía: “La política es el arte de engañar”, y en sus palabras hay mucho de cierto.

Generalmente cuando hablamos de los políticos en nuestras casas, todos tenemos algo en común, es que los políticos son mentirosos, y en consecuencia la política es muy “Sucia” por decirlo de alguna manera, tengo la firme convicción, de que a los políticos se les olvida algo que es muy fácil de hacer, “Sentido Común” hacia las cosas, pónganse a pensar por un momento, muchos problemas de nuestras sociedades actuales, se pueden arreglar si se aplica el sentido común. Pero a donde está verdaderamente el problema, es que los “Dogmas políticos e ideológicos”, no permiten ningún avance, ya que en ellos no puede existir la contradicción hacia su ideología política, es decir, por ejemplo, un socialista no puede hacer cosas de capitalistas, porque en sus cabezas irían en contra de su pensamiento político.

Y es ahí donde radica el problema de nuestras sociedades actuales, y de nuestros sistemas de gobierno. En mi caso desde hace un tiempo para acá, les confieso que no creo en ninguna opinión política e ideológica, para mí las soluciones están en hacer más y hablar menos, porque como les dije anteriormente, creo que encerrarse en una sola opinión de cómo deben ser las cosas, es alejarse de las realidades, y en consecuencia caer en un mundo de mentiras, porque lo cierto es que “La verdad es subjetiva”, ninguno de nosotros somos dueños de la verdad absoluta, por eso considero que la política es de los imbéciles, porque a pesar de que esas personas son muy estudiosas y tienen posgrados, no terminan de entender que las sociedades, necesitan acciones para resolver sus problemas, y no discursos baratos que no aportan nada.

Un dictador venezolano dijo alguna vez: “Los partidos políticos son un estorbo al desarrollo nacional”, independientemente de mis diferencias con esa persona, en la cual no puedo ejercer mucha opinión porque no lo vi, estoy totalmente de acuerdo con su expresión, la historia ha demostrado que los partidos políticos, son un grupo que defiende nada más sus intereses, aunque busquen de demostrar que es todo lo contrario.

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