El Engaño

Te conozco, sé cuándo me mientes, cuando no eres sincera, juegas a que no sé lo que haces, te pintas como la mujer perfecta y la que no comete errores, te gusta juzgarme y hacerme creer que siempre soy el culpable, me haces sentirme como el que siempre se equivoca, prácticamente me convierto en el culpable.  

¿Pero tu acaso has sido sincera? 

Te crees una experta en el arte del engaño, piensas que yo no me doy cuenta, lo que no sabes, es que me hago, como el que no sabe, me hago el indiferente, me vuelvo cómplice del silencio. Me cuesta ser sincero y sacar todo eso que llevo dentro, capaz es que pueda ser masoquista, capaz me cuesta creer que es verdad, aun cuando tengo todas las señales de que estoy en lo cierto.  

Es extraño, pensar que un ser que supuestamente te ama, es capaz de amar a otro y seguir contigo, puede ser, que ames a dos personas y quiera tenerla a ambas, pero eso no sirve para mí, cada vez pienso más, que debo avanzar y decir todo lo que siento, esperando que tu resuelvas mis inquietudes, mis dudas y mis pensamientos hacia tu persona. 

Posiblemente esa posibilidad sea remota, no creo que seas capaz de decirme la verdad, creo que me quedare sentado esperándote como un tonto, cuando tengo toda posibilidad de parar todo esto y dejarnos los puntos claros, eso es lo que siento que debo hacer. Pero en la práctica soy un cobarde que no es capaz de enfrentarte y decir todo lo que se me pasa por la cabeza.  

En el fondo creo que sabes, que yo se algo o me imagino algo, sabes que estoy al acecho esperando a que cometas ese evidente error, que te deja en completa evidencia y no puedas decirme lo contrario. Tu engaño no va a durar para siempre, todo en la vida cae por su propio peso y yo estoy esperando con bastante paciencia a que eso pase, pienso mucho en la posibilidad de dejar todo esto atrás.  

El único consuelo que tengo es saber que algún día me amaste con tanta fuerza, como te amo yo. Viajar frecuentemente me ayuda a despejar mi mente y dejar por unos minutos e incluso horas esos pensamientos que me hacen daño, que me duelen, que me convierten en un hombre sin fuerzas para seguir luchando. Puede ser que haya cometido errores, que te han llevado a buscar alternativas a mí, pero pienso que, si una persona no quiere estar con alguien, lo mejor es alejarse por el bien de ambos.  

A pesar de estas palabras, sigo con la incertidumbre de cómo actuar en esta ocasión, no quiero ser cruel, ni decir cosas que te puedan herir, por más que tú me hagas daño a mí. Prefiero evitar pasar por ese momento, donde nos digamos cosas feas, que posiblemente lleven a que nos odiemos y nos convirtamos en los peores enemigos. Al final, tú te darás cuenta si estás haciendo bien, porque la verdad, lo único que espero es que en algún momento te dignes a decirme toda la verdad y acabar con El Engaño.  

Este relato es ficticio, espero que le haya gustado.  

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