Bajo El Mismo Sueño

Marcos y José son dos hermanos gemelos que siempre han estado unido desde que estaban en el vientre de su madre, nacieron en un mundo donde tendrían todas las posibilidades de crecer en un ambiente sano y con todo lo necesario para desenvolverse en el futuro. Desde pequeños crearon una gran afición por el deporte más practicado de su país El Béisbol, gracias a que su padre practicaba el deporte todos los fines de semanas.  

No era en un ambiente profesional, sino que lo hacía por diversión, sus hijos siempre lo acompañaban desde las gradas, observando a su padre encontraron el amor por ese deporte. Marcos y José comenzaron desde muy pequeños a practicar el béisbol, tenían la suerte que tenían dos padres que los acompañaban en todo y que siempre estaban ahí para ellos, sin duda, eran una hermosa familia.  

El tiempo fue pasando y la crisis económica en su país de origen, se fue incrementando, las cosas ya no eran como antes, sus padres hacían todos los esfuerzos posibles para seguir brindándoles la comodidad que siempre habían tenido, pero era muy cuesta arriba, los hermanos a sabiendas del sufrimiento de sus padres por tratar de darles lo mejor a ellos, tomaron la decisión de comenzar a trabajar desde muy temprana edad, obviamente sus padres se rehusaban, pero a ellos les costaba ser indiferente ante la situación.  

A pesar de que los dos tenían un gran talento para el béisbol, decidieron abandonar momentáneamente su sueño de llegar a la mejor liga del mundo, por colaborar en sus casas. Ellos hacían lo que sea, tenían el concepto aprendido de sus padres de que cualquier trabajo honrado es digno. A pesar de todos los esfuerzos que tenían que hacer ahora, seguían bajo el mismo sueño de ser beisbolistas profesionales. Siempre sus amigos más cercanos al deporte, le decían que había ojeadores que estaban buscando talento, pero se les hacía complicado porque tenían que llevar el bocado de comida a sus casas.  

Para el momento eso era lo más importante, aunque en sus horas de descanso tanto Marcos como José, soñaban despierto con ese deporte que tanto amaban, pero cuando se daban cuenta que tenían que vivir su realidad actual, ponían los pies en la tierra. Mientras ellos trabajan arduamente, se enteraron de la noticia más trágica y menos esperada, sus padres habían muerto en un accidente de tránsito. Los hermanos al enterarse de la noticia, no podían creerlo, habían perdido a sus dos grandes maestros a esos dos seres que siempre dieron lo mejor por el bienestar de ambos.  

Con algunos ahorros que poseían, lograron pagar el entierro de sus padres, le costaba darse cuenta que estaban en este mundo desamparados. Ellos siguieron adelante con toda la fortaleza posible y con la cabeza muy en alto. En un día cualquiera, uno de sus amigos le comento que harían un campo de entrenamiento para elegir jóvenes prospectos, Tanto Marcos como José, decidieron ir, estaban dispuesto a intentarlo por última vez, en honor a sus padres fallecidos.  

Al llegar al lugar se sintieron bastante nerviosos, no querían llevarse una decepción, ellos estaban dispuesto a lograr esos sueños que tenían desde niños. Después de varias pruebas físicas y de habilidades, los ojeadores anunciaron que elegirían a 20 prospectos para los diferentes equipos de grandes ligas y para sorpresa de los hermanos, ellos estaban en esa lista, cada uno con equipos distintos, pero al final harían lo que tanto amaban, ellos en el fondo entendían, que sus padres estarían orgullosos de que iniciarían una carrera profesional en lo que tanto amaban.  

La historia de Marcos y José, demuestra las adversidades que se nos presentan cuando queremos ser algo en la vida. Dándonos una perspectiva de que por más difícil sea el camino, al final lo que importa es lo placentero del logro consumado.  

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