Como un  destello,  como un eco de  bondad  en él.

Una bienvenida aguarda tal premio
Y saber mucho de el
En el corazón de todo estaba floreciendo.
Y la sombra negra ganó la batalla con el corazón, te gobierna,
Su tono humilde.
Transformación milagrosa de la piedra.
Somos blancos y negros
Y si amas a alguien
Una risita inmodesta, un susurro en el oído.
Lo que le pedimos a Dios
Un sentimiento que no muere.
El agua golpea sin sentido.
En un laberinto del que no hay retorno.
En el desierto cómo Cristo mismo ayunó
Después de todo, él podría satisfacer su hambre.