Centenario del natalicio de un docente innovador: Eduardo Crespo Peraza.
Hoy 7 de noviembre de 2019, se cumplen 100 años del nacimiento de un hombre de extraordinarias características, dentro de lo que siempre ha sido la docencia. Eduardo Crespo Peraza nació hace, exactamente hoy, 100 años, en la ciudad de Caracas, y desde muy joven sobresalió como atleta en distintas disciplinas deportivas, como el basquetbol, el voleibol, el béisbol o el atletismo, pero fue -como decimos en criollo y llanero- un todero- deportivo, porque *le echaba palo a todo bojote. Desde joven se dedicó al entrenamiento deportivo, primero en el estado Aragua, y luego en nuestro estado Guárico, en donde formó destacadas selecciones en los deportes antes mencionados. Gloria nuestra. Como en sus tiempos era para una persona de escasos recursos económicos el estudio, tuvo que esforzarse en el trabajo, y pasó a formar parte del personal docente de educación física del liceo Roscio, y por gracia, esfuerzos y méritos, se le concedió el título de profesor de deportes. Toda una lumbrera, llevó a nuestro estado a varios títulos nacionales de campeón en varias especialidades. Dudo que haya yo conocido a un docente con la popularidad de este educador que, con respeto, se ganaba la confianza de sus semejantes, adultos, y hasta del "pelúo" que era el estudiante de primer año. Era común escuchar que le saludaban los colegas y mismos alumnos, al grito de : —¡Hola, Polliiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiino! Sí, le arremacharon ese apodo, que nunca supe a qué se debía. Pero Crespo Peraza no le paraba y, con su sonrisa de hombre tranquilo y sin problemas, empezaba el día con alegría. Era un humorista y bromista de primera, y traigo el recuerdo de que, como mi cara no era agraciada, duró varias semanas esperándome a la entrada del liceo, para bromear: —Mira, Lecumberre, cuídate, que por ahí anda "la máquina". Se refería a una supuesta máquina de moler feos, y en esos tiempos de la segunda parte de la década de 1970, estaba muy pegada la canción "Eliminación de feos", de El Gran Combo de Puerto Rico. El primer día me sorprendió porque no sabía a qué se refería, pero después, yo mismo empecé la echadera de broma con los demás que veía medio feos. La afición e inclinación de Crespo por el periodismo, también fueron notables, y escribía en los diarios regionales de la época, fustigando duramente a los políticos ineficientes. Recuerdo que tenía un mural de nombre Brújula, en el que ponía notas de cumpleaños, eventos deportivos y todo cuanto se le ocurría. Cada semana, los alumnos, ansiosos de ver las novedades, nos apilonábamos para ver si había colocado alguna foto de nosotros, o alguna "mamadera de gallo". Era una especie de cartelera cubierta por un enorme vidrio o cristal. Adoptó varios hijos, entre ellos, Carlos, quien pasó a ser Carlos Crespo Palma, y en 1976, fuimos colegas en una escuela básica de nuestra ciudad San Juan de los Morros. Eduardo Crespo Peraza rompió con los paradigmas y esquemas de los educadores de su época,por ser tan diferente de ellos, por ejemplo, el director Marcos Peña Bocuhard o el subdirector Teodoro Tabare, quienes evidenciaban la circunspección. No quiero decir con esto que eran intratables, pero sí les guardábamos una distancia de respeto, y hasta admiración. Crespo era nuestro amigo y hermano. Hoy a las 10 de la mañana, será el acto en la cancha del liceo Roscio, cuyo nombre es, justamente Cancha Deportiva Eduardo Crespo Peraza., y estaré entre los que dirigiremos palabras con motivo de tan importante fecha. Quien conoció y trató al profesor Eduardo Crespo Peraza, encontró a un ser humilde, divertido, virtuoso y de muchos valores. A Dios doy las gracias por ese privilegio, y que tenga privilegio su memoria.Centenario de natalicio de un docente innovador: Eduardo Crespo Peraza.