Estimado amigo, nada es mas cierto que nuestra cercanía a la muerte, al momento de nacer. Es un decreto cuya fecha de emisión nos viene por sorpresa. Pero también es verdad que nuestra Venezuela está sombría, debemos clamar brisas fuertes para despejar los cielos y poder ver un nuevo amanecer. Los gritos de las almas desesperadas se escuchan por doquier, pero somos valientes aunque caminemos por los senderos con la tranquilidad del desesperado. Y Dios dijo: Hagase la luz y apareció en el cielo un Sol radiante

Gracias