Siempre fui una persona de pocas palabras, más ahora que estoy practicando el arte de escuchar; si no tengo nada bueno que aportar simplemente no opino y me gusta así, pero una cosa es lo que comparto con las demás personas y otra es la que comparto conmigo mismo, y si que hay una gran diferencia, diría yo que es abismal.

Hoy en día está Steemit, lo conocí y abrió una serie de oportunidades que fue complicado de entender pero encajaron a la perfección con los planes que he estado marcando en mi libreta para el futuro. Agradecer a los desarrolladores de esta ingeniosa red social se queda corto. Pienso que todo su trabajo para ayudar al fin a muchas personas que se benefician de esta gran oportunidad merece un premio igual un grande, pero ¿como podríamos nosotros demostrar nuestro sello de gratitud hacia estas personas? pues, no creo que exista alguna formula mágica que nos golpee en la cara y ya, lo que si creo es que si buscas dentro de tu ser como puedes ayudar lo encontrarás.