Imaginación Perdida

Aquí llevo rato pensando sobre que escribir y entiendo que no sé de qué, no encuentro la inspiración, será que no tengo imaginación? Sera que ya se me fue esa capacidad que tienen los niños de inspirarse e imaginar cosas increíbles sin límites, sin barreras. Y empecé a cuestionarme.

¿Porque tenemos que con el pasar del tiempo madurar, porque si no, no estaremos aptos para la sociedad? ¿Por qué perdemos esa linda capacidad que tienen los niños de hacer amigos, esa en la que van al parque conocen a alguien y después de 5 minutos ya lo consideras tu mejor amigo? ¿Porque con el transcurso del tiempo nos volvemos secos y dejamos de mostrar cariño, afecto, hasta de sentirlo? ¿Porque cuando crecemos dejamos esa capacidad innata de ser felices y de inspirar felicidad? ¿Por qué dejamos de reír? ¿Porque cuando avanzamos de edad dejamos de mostrar  afecto a nuestros padres así como lo hacíamos de niños? ¿Porque vemos con buenos ojos al niño habilidoso y no al niño inocente? ¿Por qué dejamos de enamorarnos de esa forma tan inocente, bonita y sin interés como lo hacíamos en la escuela, que nuestro amor platónico era la profesora de primaria? ¿Por qué de niños mostrábamos nuestros sentimientos de forma tan normal, llorábamos por cualquier cosa, ahora ya no lo hacemos preferimos aguantar y no drenar aunque esto sea contraproducente? ¿Porque vivimos con los monstruos debajo de la cama y no le damos espacio a nuestros sueños?

Son preguntas que tal vez irrelevantes o un tanto estúpidas para algunas personas, pero es triste ver pasar el tiempo porque esto conlleva a muchas responsabilidades, y es aún más triste que dejemos de ser niños, los niños son alegría y felicidad, estos valores vienen impresos en ellos. Cuando eres niño constantemente ríes, lloras, sueñas, imaginas, creas, quieres, amas, son seres puros, libres, simplemente felices.

Existe una frase célebre de Ruben Dario “Juventud divino tesoro te vas para no volver, cuando tengo que llorar no lloro y a veces lloro sin querer”

                        ¿Porque simplemente no podemos mantenernos como niños?