En publicaciones anteriores les he hablado de mis fortalezas en la fotografía. Retomando ese hilo, debo reconocer que tengo buenas habilidades y conocimientos en macrofotografía, fotografía de naturaleza y fotografía de calle, también les he mostrado muchas imágenes de ejemplo, las cuales muestran mis avances en estos campos y mi constante búsqueda por mejorar.

Pero hay un área donde realmente siento que he avanzado muy poco, se trata de la fotografía de retrato, bien sea en estudio o en ambientes naturales. Y es que en la fotografía de retratos ya no se trata de capturar momentos de espontaneidad como en la fotografía de calle, generalmente se trata de una persona que está exigiendo que en dicho retrato quiere verse de cierta manera y muchas veces no le gusta el resultado obtenido, lo cual obliga a repetir la toma cierto número de veces.

La fotografía de naturaleza, la macrofotografía y la fotografía de calle tienen algo en común, y es que una de sus características fundamentales es el énfasis en los detalles. El detalle de las formas y los colores en los insectos para poder observar estructuras que pasan inadvertidas al ojo humano; el detalle en la textura de las montañas y los árboles, en las formas de las nubes y el color de los océanos en la fotografía de paisajes naturales; el detalle del contexto urbano donde se desenvuelve la actividad humana y las marcas del paso del tiempo sobre los rostros de las personas en la fotografía de calle.

Pero la fotografía de retrato es otra cosa, la gente generalmente quiere ocultar los detalles, los pequeños defectos que los hacen humanos y quieren verse perfectos, sin marcas, sin manchas, sin detalle. Esa parte de la fotografía aún no la he aprendido, el manejo de software de edición fotográfica para el mejoramiento de la apariencia de la piel es una de mis grandes debilidades en la fotografía de retrato. Conectar con los o las modelos es otra debilidad, si no se logra una conexión efectiva con el protagonista de la foto, las poses lucirán tensas y poco naturales y todos los espectadores reconocerán la incomodidad del o la modelo.

Con esto no quiero decir que la fotografía de retrato tenga menos valor o sea menos importante que otras ramas, claro que no, por lo contrario, se requiere de un gran nivel de preparación y empatía, ya que a través de la conexión con los modelos es cuando logras exponer su alma y retratarla, logrando grandes resultados en retratos individuales o grupales, por algo muchos de los grandes fotógrafos del mundo son fotógrafos de retratos, como por ejemplo la estadounidense Annie Leibovist, el colombiano Ruven Afanador o el estadounidense David LaChapelle entre otros.

Hoy quiero mostrarte el resultado de una sesión de retrato que le hice a una amiga, hoy quiero decirte que yo pienso que la fotografía de retrato es una de las ramas importantes dentro de la fotografía y que aunque yo se que es una de mis debilidades, quiero aprender cada vez más y convertirla en una fortaleza. Es mi deseo que este trabajo sea de tu agrado y cuento con tus observaciones para seguir aprendiendo.