Wamba: cuando la Muerte es un Arte
El peregrino se aleja de tierras palentinas, y se adentra en esos misteriosos Montes Torozos, que caracterizan una zona muy singular de la vecina provincia de Valladolid. Sin olvidar los agridulces momentos proporcionados en San Juan de Baños, en su ánimo parece resurgir, quizás con más ímpetu, aún si cabe, ese mundo perdido de los visigodos y se encamina, con el ánimo bien dispuesto, hacia un lugar que, a pesar del tiempo transcurrido, aún conserva en su nombre el recuerdo de uno de sus reyes: Wamba.
Wamba es, después de todo, uno de esos lugares privilegiados donde el Misterio parece haberse instalado eternamente, para alertar al peregrino -no olvidemos, que entre sus calles figuran nombres como Foncalada o Platerías- de que nada es casual y de que todo aquello con lo que se tropieza en su largo camino, no tiene otro fin que el de templar su espíritu, con lecciones más o menos amargas.
Por eso he querido que, antes de adentrarnos en los pormenores de su fascinante iglesia de Santa María, echemos un vistazo a su impresionante osario y pensemos por un momento, en esa pertinente compañera cuya sombra llevamos adjunta a la propia desde el mismo momento de nacer. El osario no está, en la actualidad, y a pesar de los pesares, en tan magníficas condiciones como estuvo antaño.
Pero observando las numerosas calaveras que alberga, difícil es no pensar en que, después de todo, cuando llega el momento, a la Parca se la recibe de dos maneras definitivamente contrastadas: con alivio y una sonrisa o con dolor y espanto. Al menos, eso es lo que sugieren los gestos anónimos de sus numerosas calaveras. Ahora bien, que cada uno saque sus propias moralinas.
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AVISO: la entrada original, se publicó en mi blog RECUERDOS DE UN PEREGRINO. Tanto el texto, las fotografías, como el vídeo (excepto la música, reproducida bajo licencia de Youtube), aparte de ser inéditos en Steemit, pertenecen a mi exclusiva propiedad intelectual. La entrada original, a la que se enlaza con Steemit (y @talentclub), pueden encontrarla en la siguiente dirección: https://jc347.blogspot.com.es/2014/09/wamba-cuando-la-muerte-es-un-arte.html
diseño: @txatxy
Hola juancar347, un lugar con muchas historias y cuantos recuerdos habran guardados en esas calaveras. La historia está llena de misterios y el cielo de sueños, tierras que fueron testigos de muchos acontecimientos, cuanto por investigar y contar. Felicidad siempre.
No te falta razón. Es todo un lujo perderse por esos caminos de Dios e intentar siquiera llegar a entender la enorme cantidad de misterios que ocultan. A pesar del tiempo, de las destrucciones, de los hurtos...siempre queda alguna huella fascinante. Ese lugar, realmente ha perdido mucho. Hasta tiempos relativamente modernos, había muchos más restos en el osario, pero siempre tratados con delicadeza, bien colocados, con respeto. Era una tradición y aunque no lo parezca, hay muchos siglos, muchos, contemplándonos desde esas cuencas vacías. Sí, tienes razón, tendrían infinidad de historias que contarnos. Gracias por tu comentario y un afectuoso saludo
Me encantaría conocer ese lugar, me transmitió mucho sólo con leerlo.
Si alguna vez vienes a España, y hay ocasión, no tendría ningún inconveniente en mostrártelo. Es un lugar curioso y sobre todo, muy enigmático. Seguramente hoy cuelgue la entrada del lugar concreto al que pertenece: un monasterio cuyas raíces se remontan a época visigoda, que tampoco tiene desperdicio. Gracias por tu comentario y un afectuoso saludo