Es nuestra realidad y la misma está emparentada con la falta de valores o mala educación en el hogar, porque el ladrón no roba por necesidad. Como bien dices lo material se recupera la vida no y está vale muchísimo mas. Yo viví 4 años en Maracay y junto a un amigo a veces amanecíamos hablando en la plaza Bolívar después que cerraban los locales nocturnos, porque el era manejador de artistas y nunca nos pasó nada. Eso fue a principios de los 90.