Llego la hora de guardar tu dinero, puede ser de forma física en un recipiente o de forma digital en tu cuenta de ahorro bancaria. La cantidad que guardaras debe ser acorde con lo que necesitas reunir para tu objetivo en un lapso de tiempo determinado por ti.

Todo lo relacionado a educación financiera es una lucha constante con lo psicológico y esto tiene que ver con los gastos innecesarios que asumimos, para combatir esto tienes que entrenar tu mente. Parte de este entrenamiento es capacitar tu cerebro, consiste que cuando quieras cualquier objeto, comida entre otro, que genere gastos espera 3 días para adquirirlo y al pasar los 3 días no lo sigues deseando entonces no era realmente importante para ti.

Anotar tus gastos es primordial, ya que podrás analizar los mismo y ver cuales costos podrás reducir, para que ese flujo de dinero pueda destinarse a otra causa u al fondo de ahorros.

Luego de analizar tus gastos crea un presupuesto tomando en cuenta que sacaste ya todos esos gastos inorgánicos, tu presupuesto puede ser diario, semanal o mensual, el más recomendable es semanal, el propósito de este paso es darte cuenta de los gastos previstos y facilita el reconocimiento de los gastos imprevistos para analizarlos y de ser el caso corregirlos en el futuro para el ahorro de tu dinero.