Allá donde todo se esconde y los ojos no ven, se encuentras los motivos que buscamos. La frencuencia de los latidos te guiarán; y sí, leí todo lo escrito y sentí quizás distinto, pero sentí.
Allá donde todo se esconde y los ojos no ven, se encuentras los motivos que buscamos. La frencuencia de los latidos te guiarán; y sí, leí todo lo escrito y sentí quizás distinto, pero sentí.
Me alegra saber que lo sentiste, ¡muchas gracias por leer y comentar!