HOMO HABILIS (Hombre constructor) Parte uno
Creo que la actividad principal del ser humano desde su abandono de las cuevas naturales hasta nuestros días, ha sido construir su propia vivienda.
El año 1998, cansado de la comunidad de vecinos, decidí hacerme una casa. Me metí en esa aventura a pesar de que había quienes me desanimaban porque emprendería, según ellos, un proyecto muy difícil. No obstante quise probar y comencé dibujando un primer boceto:
Hablé con varios arquitectos para pedirles presupuestos de los planos oficiales. Todos ellos me pedían las características de la casa que yo quería, y a todos les enseñaba este dibujo .
Me enteré de que lo primero que había que saber eran las ordenanzas municipales acerca de la construcción de la vivienda, dada la superficie y localización de la parcela.
Miré todas las parcelas en venta que no distaran de Málaga más de 50 kilómetros y que estuviera dentro de mis posibilidades económicas, hasta que encontré una con posibilidad de construir la casa orientada con vistas al sur y la compré.
Me ocurrió una anécdota increíble pero rigurosamente cierta: cuando ya era mía la parcela la pateé con gusto observando cada piedrecita y cada arbusto silvestre que crecía en ella y salí hacia la playa dando un paseo para comprobar los minutos que iba a tardar en llegar desde la casa al mar. Cuando llegué a la orilla de la playa me vino la idea de comprobar la orientación perfecta de la parcela y a los familiares que me acompañaban les comenté impaciente: “tendría que tener una brújula para saber exactamente la orientación de la parcela y cuál no sería mi sorpresa que, unos pasos más adelante, encontré a mis pies un llavero sin enganche con un termómetro roto y con una brújula en perfecto estado. Ésta:
¡A veces ocurren casualidades en la vida que son premonitorias! Desde ese momento ya no me cupo la menor duda de que el proyecto sería un éxito.
Alborozado regresé a la parcela: efectivamente, orientación sur con una leve inclinación hacia el este. ¡Perfecto!
Como en resolver los tramites previos, preví que iba a tardar unos meses, mientras tanto, el padre de mi mujer ocupaba parte del tiempo de su jubilación en cultivar en un trozo de la parcela unas verduras, riquísimas por cierto, ecológicas, sin químicas ni insecticidas.
Al día siguiente llegué a las oficinas del Ayuntamiento y la funcionaria me facilitó una fotocopia de la legislación, y me enteré de que podía construir una casa de hasta dos plantas y podía ocupar un tercio de la parcela. Cada Ayuntamiento tiene una legislación distinta a la de otros, por eso es importante leer detenidamente todos los puntos al respecto, como por ejemplo cuántos metros tiene que haber desde las paredes exteriores de la casa a los límites de la parcela. etc. etc.
Me vi obligado a volver al Ayuntamiento en sucesivos días a consultar muchas dudas que me surgían. Un funcionario me atendía perfectamente y me las resolvía.
Tendría que contratar un arquitecto y un aparejador. No obstante me dije: “¿Podría yo mismo dibujar los planos previamente siendo de letras y sin ser especialista en dibujo técnico? Me respondí que cualquiera que sepa leer puede.
Dicho y hecho. Compré este libro y el programa de dibujo “Autocad 14”.
El Autocad es un programa muy preciso, por lo que encargué un estudio topográfico de la parcela para saber las medidas con una exactitud de centímetros. El ingeniero técnico que lo realizó me proporcionó el plano exacto de la parcela y sobre ella comencé a dibujar, con el Autocad, el plano general de la casa, la valla, el jardín, la piscina e incluso la barbacoa.
Después de comprobar que, siguiendo las instrucciones del libro, el Autocad no era imposible, y que con saber leer es suficiente para entenderlo, seguí dibujando despacio, sin prisa pero sin pausa, la planta sótano, la planta baja, la planta primera, el alzado de la fachada y muchos otros detalles. En sucesivos artículos expondré mis dibujos de ese mi primer contacto con el Autocad y de otros muchos detalles constructivos hasta terminar la casa.
¿Construir tu propia casa? Pero, si es muy fácil... (Seguirá)
Se requiere fuerza de voluntad y no escuchar esas voces destructivas.
Quedo a la expectativa de la siguiente entrega...
Cierto. la tendré preparada pronto
Felicitaciones!!! Usted ha demonstrado que quando um hombre quiere algo de verdad, lo consigue!
Estaré esperando por la siguiente entrega! Saludos!