El Clan de los Gochos

Federico era argentino de unos 47 años, pero le gustaba vestir como un joven de 20,se había casado solo una vez pero en ese momento ya se encontraba divorciado, fue un fracaso su matrimonio, el no podía tener hijos y su ex esposa era lo que más deseaba. Luego de su divorcio se fue a vivir a Miami y llevaba una vida loca, le gustaba las mujeres de la calle, mujeres iban y venían, tenía que tener cuidado ya que la prostitución es ilegal en Miami y siempre estaba asustado, ya que podía ser una policía encubierta. Con el tiempo descubrió los servicios de scorts por internet, era más seguro contratarlas por esa vía, pero la soledad lo estaba deprimiendo. El quería alguien siempre a su lado, una buena mujer que lo amara y lo apoyara. Se inscribió en varias websites para encontrar pareja, no importa de qué lugar del mundo. No estaba resultado, así que se puso a buscar en facebook grupos para encontrar pareja. Un día revisando sus redes sociales, se encontró con una hermosa jovencita que captó su atención así que decidió escribirle. Su nombre era Estefani, tenía solo 22 años y una belleza que hacia olvidar aquellos 25 años de diferencia. Ella le respondió sus mensajes y la petición de amistad. Las edades se volvieron solo números, hablaban todos los días. Ella era venezolana, vivía en el Estado Táchira. El sabia que Venezuela estaba pasando por una crisis nunca vista, con gente pasando hambre. El era un hombre con recursos, era un inversionista en criptomonedas y había hecho mucho dinero.

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Federico ahora era un hombre con mucho ánimo, todos los días se levantaba ilusionado, quería conocer a Estefani, le conto a Manuel, el único amigo que tenia en Miami, un señor que tenía un negocio de tacos y que a Federico le encantaba comer. Manuel le dijo que debía ser cuidadoso, que una mujer tan joven solo estaba buscando dinero, además que era venezolana, seguro quería alguien que la sacara del infierno de país en que vivía. Federico se hacía el sordo, no le importaba nada de eso, la chica le había demostrado aprecio en sus video llamadas, se veía buena gente, era una gocha simpática, ella le conto que a las personas de donde ella vivía, le decían gochos.

Luego de 2 meses de relación virtual, Alejandro decidió viajar hasta Venezuela para conocer a aquella hermosa mujer dejando atrás su vida de soledad. Apenas llegó quedó encantado al ver que todo era real, Estefani con su cara angelical lo recibió con una sonrisa y un abrazo. Los nervios había invadido el cuerpo de Federico, esto era algo novedoso tras años de una gran periodo de soledad y falta de cariño verdadero. Habían estado esperando ese momento, estar frente a frente así que fueron por un café y al igual que por teléfono, hablaron horas, la conexión era tanta que cuando estaban juntos era como si el mundo no existiera, solo eran ellos dos.

Al caer la noche, llegó el momento que tanto anhelaban y sus almas se unieron, un acto sumamente especial, el roce de su piel, el recorrido por su delgada figura era el tour favorito de Federico. Tan acostumbrado a las prostitutas, el sentir las caricias y los besos de esta joven, tan reales y sinceros, lo hicieron sentir especial. Cuánta conexión en esos dos seres, ella era solo una niña que jugaba a ser una adulta y él un señor que solo quería disfrutar, sin saber que quedaría enamorado. Lo hicieron una y otra vez, Estefani parecía sentirse en el cielo con aquel hombre mucho mayor que ella.

Federico pensó que esa relación seria clandestina, ¿qué diría la sociedad al ver a Estefani con un hombre veintitantos años mayor que ella? Pero no fue asi, ella le dijo que no importaba, que no se avergonzaba, que se sentía orgullosa, que le gustaba mucho. Fueron pasando los días juntos, el quería estar junto a ella, el le empezó a contar cosas mas privadas de su vida, su divorcio, que estaba solo, sus padres habían muerto, era hijo único y se fue de Buenos aires hace muchos años, no tenia familiares cercanos y era un hombre muy infeliz y que ella lo había salvado de la depresión. Ella le preguntaba cada vez sobre sus asuntos, cosas de su vida, quería saberlo todo, y mientras más le contaba, ella le hacía el amor con más pasión. Federico le compro un montón de regalos, se fueron al Centro Comercial y le fue comprando ropa y joyas en cada tienda que entraban, ella le pregunto de dónde sacaba tanto dinero y el le conto que tenía mucho, que no se preocupara, que era un inversionista exitoso y tenia gran capital guardado en el mercado cripto. Ella puso cara de que no entendía nada de eso, pero estaba muy feliz de sus regalos en un país que estaba en ruinas. Esa noche en el hotel Estafani recibió una llamada, era su familia avisándole que su mama estaba muy enferma en casa, se puso a llorar, Federico se preocupo y le pregunto que pasaba, ella le conto que a su madre le había dado un ACV y no tenían para cubrir los gastos médicos. Inmediatamente el se puso a la orden para solventar todo eso, alquilarían un vehículo esa misma noche para ir hasta el pueblo donde vivía la familia de Estafani.

Llegaron a pueblo cuando todavía no había salido el sol, recorrieron un extenso camino de tierra hasta que llegaron una casa de bahareque muy sencilla. Una señora gorda que dijo ser la tia los recibió, Estefani le dijo al chofer del vehículo que ella le avisaba si lo volvían a necesitarlo, pero que no sabían cuando tiempo estarían allí. Él le dejo la tarjeta de sus servicios y arranco. Entraron a la humilde vivienda, la mujer les sirvió café y Federico pregunto dónde estaba la madre enferma. Tomo la mano de Estefani y ella se las quito, la chica había cambiado su actitud, no le respondía lo que preguntaba, se sentía confundido. A los pocos minutos abrieron la puerta y entraron 4 hombres y uno de ellos fue directamente a donde estaba Estefani y le dio apasionado beso en la boca.

A Federico le comenzó a hervir la sangre, no entendía que estaba pasando y se lanzo contra el hombre que estaba besando a la mujer de su vida, pero un fuerte golpe le saco el aire cayendo al suelo aguantando el dolor. Los otros hombres lo agarraron y lo ataron a una silla. El pobre Federico estaba temblando de miedo y hablándole directamente a Estefani le pregunto que significaba todo eso. Ella no lo miraba, se sentó en el mueble y su tía le trajo una portátil. Los hombres se burlaban de Federico, de su cara de idiota, de su falta de cabello ¿Cómo te creíste que una mujer como Estefani se enamoraría de ti? ¡Eres un perdedor! ¡Un imbécil! ¡Pendejo!¡Boludo! Le dijeron que eran el Clan de los Gochos, una de las bandas mas peligrosas del Táchira y que se dedicaban ahora a captar pelotudos como Federico, usando los encantos de la hermosa joven, para embobarlos y robarles todo el dinero. Que si quería salir con vida de allí tendría que darle todo su dinero. Fede se sintió el hombre mas idiota del mundo. Le conto todo a esa chica, le conto sobre su dinero. El se negó a hablar, pero el Clan de los Gochos eran sanguinarios, las torturas no tardaron en llegar. Le taparon la boca y fueron partiéndole uno a uno los dedos de las manos. Aun con eso, Federico aguantaba y no decía nada. ¿Te gusto comerte ese pescadito fresco verdad? Le decía el líder del clan. ¡Ella es mi mujer! ¡Ese concha divina es mía! ¿Te la gozaste? ¡Ahora debes pagar! ¡Dinos tus calves privadas! ¡Queremos todas tus criptos! Fede se dio cuenta que esta gente sabía lo que hacia, ella lo engaño dándole a entender que no entendía nada de criptomonedas. Era un banda organizada. No quería morir, quería regresar a Miami, buscar prostitutas, fue un error el buscar una novia, fue un error ir al país más peligroso del mundo, donde todos están devorándose entre sí. Uno de los delincuentes lo puso en cuatro y le bajo los pantalones, le dijeron que si no les decía todas sus llaves privadas lo violarían antes de picarlo en pedazos, le mostraron videos de ellos haciéndolo en sus años de prisión.

El triste Federico no tuvo más opción, termino por decirles todas las llaves privadas, no perdería su hombría, su orgullo. Rápidamente la chica se encargo de transferir todos los fondos desde su portátil. El líder de la banda se fue uno de los cuartos y los otros tres le dieron una paliza a Federico. La joven debe haber sentido lastima, ya que les ordeno que se detuvieran, que ya tenían todo. ¡este resulto ser una mina de oro! Les dijo a todos, la tía trajo del fondo un barril y lo puso en el medio de la sala. El hombre salió de su habitación y estaba vestido de policía, se despidió de Estefani, dijo que le tocaba turno de 24 horas hoy, que se encargaran del argentino boludo. ¡Era policía! Si el perdedor de Federico lograba escapar de allí no podría ni ir a la policía. El uniformado antes de irse se acerco a Estefani y le dio un beso mientras le apretaba duro el culo. Federico se puso a llorar por ser tan estúpido, en solo un instante paso de estar en el cielo, al infierno. Los otros hombres lo agarraron y lo llevaron al patio trasero. Tenían una gran jaula con 20 con perros pitbulls en ellas, al ver a Federico se pusieron a ladrar todos, se les notaba hambrientos.

Lo siento , fue lo único que ella le dijo, lo metieron dentro de la jaula y todos los perros se fueron hacia el, comenzaron a devorarlo , Federico no podía ni gritar, sintió su sangre brotar de la garganta luego de que un pitbull le arrancara un pedazo, sus ojos se fueron cerrando, a lo lejos veía a la hermosa chica que había marcado su vida hasta el último momento