Creo que todo depende en que etapa de tu vida te encuentras y que implicaciones pueden tener tus errores sobre ti y otras personas.
Asumir, sin más, que después de caernos nos podemos levantar me parece un lugar común. Se imaginan amigos al alguien que invierta los recursos destinados a la educación de sus hijos y que pierda esos recursos; o un empresario que apueste por invertir en una ampliación de su negocio y fracase.
Considero que toda decisión, independientemente del margen de error que exista, debe ser tomada con la mayor información posible.
Con ello podemos evaluar en que medida nuestras fortalezas nos potencian y en que escenarios tenemos debilidades. También para poder visualizar las oportunidades que existen en el entorno y a que amenazas nos encontramos expuestos.
Por su puesto que existe un margen de error y como seres humanos no podemos equivocar, lo que no creo es que lo hagamos sin medir el impacto de nuestras acciones y tampoco sin hacernos del más importante activo que tenemos en nuestros días como lo es la información, interpretada y convertida en datos.