IMPORTANTE Escribiré esto en un tono serio, pero no se confundan, ni el texto ni mucho menos el video están hechos con esa intención. De querer saltarse la intensidad y pasar directo al video click aquí. De no tener problemas con la racionalización del humor "puede pasar con confianza, va a verme limpiecita como un sol..."

Es cierto que siendo correctos, responsables y trabajadores mostramos nuestro lado que será aceptado socialmente con mayor facilidad, pero vamos, no es lo único que nos define. Creo que la manera en como jugamos (física y mentalmente) nos caracteriza de una manera más sincera. Jugamos con quienes sentimos confianza, se trate de amistades, conocidos o hasta nosotros mismos

El juego desnuda la máscara, el juego es una de tantas maneras para conocer lo que no sabemos de nuestra naturaleza.

En mis vacaciones de agosto-septiembre de 2017 tuve la oportunidad de quedarme a dormir en tres lugares distintos durante un mes aproximadamente: Santo Domingo, Mérida; Yaritagua, Yaracuy; Agüide, Falcón. Esas semanas se sintieron como tres vacaciones juntas. Cada lugar me dejó sensaciones distintas cuyos recuerdos todavía me abrazan.

En una de las tardes en Yaritagua mi mamá y sus amigos decidieron pasear un rato por Barquisimeto, Lara, ya que queda relativamente cerca. Rechacé la invitación porque quería quedarme en la casa de nuestros amigos, sin importar que no haría mucho, en especial porque tenía tiempo sin estar solo ni en Santo Domingo ni en Yaritagua (Falcón sería la última parada). De repente veo un gato negro sobre el techo de un carro, haciendo cálculos sobre la distancia que había entre él y el tejado en el que se quería montar. Cuando un gato piensa demasiado un movimiento normalmente falla, "este gato se va a caer" pensé, por lo que busqué mi cámara, le coloqué el teleobjetivo y en un dos por tres estaba grabando al gato desde mi ventana. Empezó el juego inútil.

Hice un primer video riéndome (el de la caída), pero luego mi mente no quiso parar, sino que emprendí el camino por luna narración automática sin un fin en específico más que la autodiversión. Estaba limitado por el angulo visual del teleobjetivo (200mm, muy reducido en comparación al ángulo visual del ojo humano) así que pretendí apropiarme de la realidad que estaba justo en frente de mi por medio de la palabra, lo logré.

Justamente en ese viaje tuve la oportunidad para reencontrarme conmigo mismo, con el Silvio del pasado que tanto reprocho, pero al que a su vez le agradezco tanto. Mi educación media estuvo llena de bromas, chistes, flojera e irresponsabilidad -que bueno que la irresponsabilidad está superada, los otros tres aspectos siguen presentes- junto a mis grandes amistades que todavía siguen siendo eso: grandes. Cuando no me la pasaba jugando en la computadora con mis amigos, me la pasaba jugando en mi cabeza, de lo segundo llegaron a salir videos que en realidad no sirven de nada (respecto a la utilidad de nuestro hacer), y su valor justamente reside en tal inutilidad.

El desinterés por el colegio me hizo aprender a vivir sin una máscara, me la pasaba de juego en juego, primero con las personas en las que confiaba (cuando era muy penoso) y luego con quien me de la impresión de que pueda jugar (ahorita, que ya soy más salido que el carrizo).

Agradecimientos especiales a mi gran amigo @wilmarnm y a su súper hermano @wildermanjnm por ayudarme a montar mi juego inútil. Como ya he dicho en varias ocasiones no poseo un equipo lo suficientemente bueno como para editar videos, y al no tenerle miedo a la ayuda y confío en mis amistades, busco su asesoría y asistencia para las cosas que yo sé que no podría hacer tan bien.