El miedo escénico
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Un peso psicológico
Durante algunas actividades, nuestra estabilidad psicológica es muy determinante. En actividades donde somos la mira ante toda una sociedad (bien sea una práctica de un partido, un discurso, académicamente o incluso de manera laboral), la psicología es mucho más determinante.
Una actitud y un estado mental óptimo siempre serán beneficiosos a la hora de realizar estas actividades, mientras que un estado deficiente nos limitará en todo.
Es tanto así, que conocemos y hemos hablado sobre la relevancia que toma estar psicológicamente óptimos y le hemos colocado nombres, tal como es el miedo escénico.
Se le conoce como miedo escénico, a el término más popular cuando sentimos ese temor de exponernos a la opinión de terceros por un posible rechazo, una equivocación o una mala reseña que determine una mala evaluación de nuestro desempeño.
Existen diversas estrategias, métodos y consejos acerca de como controlar ese estado, ya que con este, podríamos someternos a equivocarnos de más incluso, por lo tanto es un tanto molesta a la hora de exponernos.
No sólo es negativo
Existen personas (más común en los artistas), que necesitan de ese sentimiento y aseguran que es imposible poder llevar a cabo una presentación sin antes sentir ese miedo característico del qué opinarán los demás al salir en escena.
Se puede decir que para llevar acabo ciertas actividades nuestro cuerpo necesita un "empujón" o algo que nos haga sentir presionados a hacerlo (existen personas que trabajan más rápido y eficientemente bajo presión).
Es un estado de activación. Algo muy necesario para llevar a cabo actividades que requieran un esfuerzo psicológico mayor al que estamos acostumbrados. Entre más activación, mayor será el rendimiento hasta cierto punto, donde este comienza a disminuir si el grado de activación aumenta más de lo normal.
Personalmente, funciono más con ese grado de activación y me resulta.
Combatir el miedo escénico es posible
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Las razones por las cuales el miedo escénico predomina es naturalmente por la inseguridad, el miedo al rechazo y emociones ligadas a la autoestima. Es por ello, que es importante identificar que factor predomina mayor en nosotros para poder atacarlo individualmente y acabar con el problema.
Anteriormente, yo era una persona muy temerosa y padecía del miedo escénico. Con el tiempo, fui obteniendo mayor seguridad de mi mismo, ya que me dí cuenta que mi problema era en mi autoestima, logré superarlo y darme cuenta de mis potencialidades y pude explotarlas como era debido. Una pequeña anécdota.
Dicen, que la forma más eficiente de controlar los nervios y ganarle al miedo escénico, es con la utilización controlada de la respiración. Esto se debe a que generalmente, tenemos mayores pulsaciones por el miedo y esto nos hace tener un mal rendimiento y mala experiencia o disfrute de nuestra actividad.
Es posible atacar al miedo escénico, es solo una barrera o bloqueo mental. No es fácil, pero no es imposible.
Realmente es lo mas detestable que vive una persona, refleja miedo inseguridad entre otras cosas, por una extraña razon desde muy pequeña hablaba delante de muchas personas por concursos y nunca senti temor. Maria
Es una experiencia bastante detestable para el que lo vive, incluso para las personas que están bien preparadas y tienen el talento para demostrar de lo que están hechos, los nervios y nuestra mente en ocasiones nos dan malas jugadas y como resultado, nos da temor. Anteriormente, yo sí era uno de ellos que les daba temor, hoy en día lo he ido dejando atrás.
el miedo escénico yo creo que es el peor enemigo de uno yo no canto pero cuando me tocaba exponer o dar un discurso me daba de todo
Es bastante duro luchar contra ello y es algo que muchos padecemos, se podría decir que es bastante común. Lo importante es darnos cuenta del porqué nos genera ese miedo y atacarlo directamente:)
Buen contenido.
Muchísimas gracias. Un saludo.
Soy abogado profesor de oratoria .. y siempre le muestro a los estudiantes que la oratoria te da poder sobre los demás, entonces no deberíamos temer sino dirigir .. con practica todo se puede
¡Interesante! El poder de la oratoria va un poco ligado al miedo escénico para aquellos que no la tienen desarrollada como lo desearían. La práctica hace al maestro y sí, tienen muchas razón tus palabras. Siempre he sido de los que dicen que el mando lo tenemos nosotros en ese momento, los demás son simples espectadores, somos los que nos sabemos de pie y letra lo que diremos.