Cada día nos levantamos apurados, nos "embellecemos" antes de salir de nuestras casas, nos vamos al trabajo sin comer, en nuestro auto, camionetica o metro, terminamos de hacer lo que nos falta y así dentro de la cotidianidad nos vamos hundiendo en un mar de cosas que no cambian y no nos benefician.

Preferimos muchas veces invertir nuestro dinero en:

• maquillaje
• crema para antes de dormir
• para después de dormir
• para antes de salir
• acondicionador
• crema para peinar
• para fijar
• rimel
• base
• perfume
• loción de baño
• desodorante

La lista puede ser infinita y por fuera una maravilla, pero por dentro nuestro cuerpo y nuestra mente casi explota, introducimos comida basura, remedios, pastillas, vitaminas en cápsulas, vemos contenidos violentos, nos convertimos en seres invadidos por muchas cosas, pero pocas de ellas esenciales.

Yo propondría hacer un stop y pensar en realmente cuáles de las cosas que hacemos y las cosas que usamos, lo que pensamos, decimos y hacemos son necesarias para ser feliz y hacer felices a quienes nos rodean.

Es momento de hacer cambios verdaderos y profundos para que cada espacio en este momento de vida sea realmente pleno y lleno de luz.

Por cierto les recomiendo un libro excelente, que puede hacer que cambiemos muchas cosas en nuestra vida de manera positiva, se llama La magia del orden de Marie Kondo.