En la batalla que siguió, se calcula que cientos de somalíes murieron. Unos 18 estadounidenses y dos soldados de la ONU murieron. En ese momento, Estados Unidos estaba liderando una misión de la ONU para poner fin a la guerra civil y el hambre en Somalia. En seis meses, Estados Unidos retiró sus fuerzas de Somalia. El fracaso percibido de la misión somalí hizo que los Estados Unidos desconfiaran de intervenir en las crisis africanas.

Abdulaziz Ali Ibrahim estaba trabajando con la ONU en Somalia en ese momento y vivía en una casa a 700 metros del lugar del primer accidente de helicóptero.

La pérdida de los dos helicópteros Black Hawk durante la batalla del 3 de octubre sorprendió a los estadounidenses, pero no debería haberlo hecho. Una semana antes, en un incidente que inexplicablemente pasó inadvertido para el público, los somalíes derribaron un UH-60 el 25 de septiembre a través de una granada propulsada por cohete, matando a tres miembros de la tripulación. Este Black Hawk no pertenecía al 160º Regimiento de Aviación de Operaciones Especiales del Ranger de la Fuerza de Tareas (TFR), sino a la 101 División Aérea, que había unido sus helicópteros a la 10ª División de Montaña, desplegada en Somalia como la Fuerza de Reacción Rápida ( QRF). El incidente debería haber hecho sonar las alarmas, pero no lo hizo, ni siquiera entre los pilotos de la 160a, que creían que sus tácticas y entrenamiento superiores en comparación con los de las tripulaciones de vuelo entrenadas convencionalmente les permitirían escapar de tal destino.

El incidente marcó la primera pérdida de un helicóptero durante la guerra y fue una gran victoria propagandística para la Alianza Nacional Somalí (SNA), el principal beligerante que se enfrenta a las fuerzas de las Naciones Unidas (ONU). Anunciaba los horrores por venir.

Lo que se suponía era una misión de 90 minutos se convirtió en una batalla de 15 horas cuando dos helicópteros American Black Hawk fueron disparados desde el cielo, dejando a los soldados varados y rodeados.

Debido a muchos factores, incluida la disparidad en el poder de fuego, la resistencia somalí solo puede ser descrita como una falla táctica. Las estimaciones varían ampliamente, desde 200 hasta miles de personas, incluido civiles. Sin embargo, muchos fueron asesinados directamente por la batalla, lo más probable es que el número final de muertes fue mayor que en el período inmediatamente posterior: las condiciones de vida en el Tercer Mundo y la falta de atención médica aseguraron que muchos más morirían en los próximos días.

La Batalla de Mogadiscio es más que una historia perdida. La experiencia se ha grabado tanto en un libro como en una película de éxito, pero la verdadera historia detrás de Black Hawk Down más increíble que la versión de Hollywood.

El piloto y copiloto del helicóptero Super Six One murieron instantáneamente. Aunque una fuerza de rescate ayudó a salvar a los sobrevivientes heridos, otro hombre más tarde morirían a causa de las heridas. El Jefe de Operaciones, Mike Durant, estaba pilotando un segundo Black Hawk cuando su helicóptero también recibió un impacto de un lanzagranadas. Al sufrir una fractura en la espalda e incapaz de moverse, Durant pudo escuchar a la multitud que se acercaba y se acercaba a él y pensó: "Están en camino y me van a matar". Durant fue capturado y secuestrado. En una de sus palabras describe como a uno de sus captores le dijo:

La Casa Blanca respaldó la amenaza con el despliegue de una unidad de infantería mecanizada, incluidos los tanques Abrams y los vehículos de combate Bradley, un décimo batallón de Montaña adicional, AC-130 Specter, un nuevo equipo de operaciones especiales y la batalla del portaaviones USS Abraham Lincoln grupo. La UNITAF tenía más poder de fuego que nunca antes a su disposición, y el presidente había expresado sin rodeos que estaba dispuesto a usarlo si Durant no era puesto en libertad de inmediato.

La gravedad del gobierno de Clinton sobre la escalada es un asunto diferente. A medida que se desplegaban los refuerzos, Washington ya había resuelto el retiro. Hubo una considerable presión política y pública para dejar así las cosas en Somalia y librar otra batalla, incluso con el único propósito de rescatar a un miembro del servicio estadounidense, habría complicado aún más las cosas. Afortunadamente, los señores de la guerra somalíes tomaron en serio la amenaza de Oakley e inmediatamente liberaron a Durant, facilitando el fin de la participación de los Estados Unidos en Somalia.

19 soldados norteamericanos perdieron la vida, mas de 70 heridos y mas me mil somalies entre rebeldes milicianos y civiles somalies murieron, sumando mas de 4 mil heridos. En 1999 el periodista Mark Bowder escribió un libro "la historia de la guerra moderna, Black Hawk Down", el cineasta Ridley Scott realizo la pelicula en el 2001 con el nombre "La Caida del Halcon Negro". Existen juegos de consola y PC, con el mismo nombre.