Un Día En La Naturaleza

Saludos mi gente, han pasado días duros desde que tomé la decisión, pero ya sabía que no sería nada fácil ni mucho menos cómodo. Lo importante es que sigo aquí, intentándolo y dando el todo por el todo.

Ya por lo menos tengo un empleo y solo falta esperar que se haga efectivo y poder volver a mi vida diaria con algo de normalidad.

De momento les cuento que para liberar todo este estrés y carga emocional, mi bella compañera de vida me propuso salir a despejar la mente en la naturaleza, al aire libre, respirar otros aires y dejar que la mente se libere de tanto pensamiento pesado.

Y así fue como visitamos el Jardín Botánico de Buenos Aires. Un lugar donde, a pesar de la gran cantidad de personas, se respira un aire de paz y tranquilidad que no había sentido desde hace meses. Vimos muchas especies vegetales y animales, unas conocidas ya por nosotros y otras totalmente nuevas. Nos dio tiempo hasta de sentarnos, relajarnos y replantear las estrategias a seguir en esta nueva etapa.

Luego de eso nos fuimos al Rosedal de Palermo, lugar más movido y en el que las personas amantes de las flores y rosas coloridas daría lo que sea por visitar. Lugar hermoso como ninguno, abierto, multicolor, lleno de gente que se nota en su cara que, al igual que yo, visitan este lugar para desprenderse de tanta mala vibra y pesares del día a día en una ciudad tan vibrante.

De camino entre estos dos lugares pasamos por el EcoParque Interactivo de Buenos Aires, estaba cerrado y lleva sobre sí una lucha entre los que quieren que lo cierren y los que no. Una eterna lucha entre los que defiendan la libertad de los animales y los que defienden el dinero que se hace exhibiendolos. Lo que sí es que a través del cerco pudimos observar varios de estos amiguitos que hacían saltar de alegría y emoción a todos los que circulaban por las adyacencias, entre ellos pues mi novia y yo.

No me queda más que decirles y comentarles que no permitan que ciertas circunstancias de la vida los encierre en pensamientos negativos. Esas cosas debemos manejarlas como temporales y que pasarán más temprano que tarde. Siempre debemos pensar positivamente. Y si no se puede, hagan como nosotros, una tarde al aire libre, en contacto con la naturaleza y verán como se va lo negativo y te llenas de pura energía positiva. Fe y paciencia.