SI VIVIÉRAMOS EN EL ESPACIO NO TENDRÍAMOS EXTREMIDADES. ¿O Si?
La formación y la distribución del hueso viene determinada tanto genéricamente como por las tensiones y cargas que se imponen a los huesos, especialmente durante la infancia. En lo que concierne a sus consistencia, dureza,forma y grosor, los huesos individuales están hechos a la medida de las tareas especificas que deben realizar e incorporan la misma clase soporte estructural con el que diseñan las maquinas y los edificios para resistir las cargas a las que se someten.
Imagen: http://ensalud.net/amputados-y-deportes-superando-las-expectativas/
El fémur, hueso del muslo, que es el mas largo y el mas fuerte de todos, sigue el mismo principio básico de ingeniería, puesto que es un cilindro hueco cuyo excelente diseño asegura la máxima resistencia con el mínimo volumen. Mide unos 50 cm de longitud y 2,5 centímetros de grosor en el hombre adulto es capaz de resistir unas presiones de 3,500 Kg por centímetro cuadrado.
La actividad física puede incrementar tanto el volumen como la densidad de los huesos, en tanto que la inactividad de lugar a su disminución. Por ejemplo, los antiguos soldados de caballería llegaban a desarrollar nuevos huesos en los muslos como resultado del trabajo de montar a caballo. Esto, que naturalmente constituye un caso extremo, muestra como los huesos esculpen la maquina corporal para llegar a cubrir la demandas físicas que se nos presentan.
Esto es maravilloso, ¿no?. Ahora, ¿Que pasaría si nos criáramos en un ambiente distinto al de nuestro planeta?
Las exploraciones espaciales han demostrado la gran sensibilidad del hueso a los cambios ambientales. Parece que una vida permanente en el espacio, sin gravedad, llegaría a reducir las piernas humanas a muñones carentes de propósito. Estudios radiológicos de los pioneros de los vuelos "Geminis y Apolo" revelaron la perdida de la estructura osea, que llegaba a representar 4 gramos de calcios por mes; es decir, del 0,3 al 0,4% del calcio corporal total. La Evidencia Obtenida de la misión del "Skylab", que duro 84 días, fue realmente preocupante . Los huesos de los talones de 2 de los 3 miembros de la tripulación disminuyeron de densidad, a pesar del ejercicio vigoroso que realizaban y de la dieta espacial que seguían. Las estructuras delgadas y frágiles de los huesos de los tripulantes parecían propicias de los pacientes de osteoporosis.
Creditos: La Maquina del cuerpo.- Cristiaan Barnard
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Un tema donde soy un neofito, pero lo presentas muy bien, Saludos. Te sigo.
Gracias por tu visita. Estaré atento a tus publicaciones.
Saludos.
Un excelente post. Había escuchado o leído con anterioridad algo sobre el tema, pero en la forma que lo presentas resulta fácil de entender. Saludos
Gracias por la visita Manuel. Ese es el enfoque, conocer ciertos aspectos de cuerpo humano de una forma muy sencilla.
Estaré muy atento a tus publicaciones Saludos.
Y si toman el suficiente calcio estando en el espacio?