En una antigua entrega de esta serie de artículos sobre la relación tecnología-sociedad habíamos introducido la perspectiva de estudio ‘adopción tecnológica’, la cual acoge investigaciones cuantitativas y sociológicas para intentar explicar y predecir la adopción de las tecnologías por parte de los usuarios; investigaciones tales como el modelo de aceptación tecnológica de David y otros (1989), conocido en inglés como technology acceptance model (siglas TAM).

Vimos que este modelo ha sido un referente en este campo, e intenta predecir el comportamiento de uso como consecuencia de la percepciones que tenga el usuario sobre la utilidad y la facilidad de uso del artefacto a adoptar. Si la percepción era estimada como positiva, entonces habría 'aceptación', pero sino, no se produciría la aceptación.

No obstante, este primer modelo recibió críticas por su poca capacidad explicativa, pues estribaba el comportamiento de uso en apenas dos variable: la utilidad y facilidad de uso percibidas que adicionalmente no estaban suficientemente detalladas. De allí que haya recibido revisiones que han dado origen al TAM2, la Teoría Unificada de Aceptación y Uso de la Tecnología (UTAUT) y el TAM3, siendo estos dos últimos intentos de 'unificar' los criterios en teorías de propósito más general.

Antes de llegar allí, repasemos un poco la primera modificación mayor que dio lugar al TAM2. Este nuevo modelo fue propuesto por Venkatesh y Davis (2000) y se esquematiza en la imagen 1 (véase).

Como se observa, esta versión del estudio provee mayores detalles explicativos de las razones que pueden tener los usuarios para encontrar un sistema de información verdaderamente útil. Se teoriza que la evaluación mental hecha por el usuario con respecto a la correspondencia entre las metas de trabajo y las consecuencias de llevar a cabo tareas a través del sistema es lo que desemboca en la formación de percepciones sobre la utilidad de la tecnología en cuestión.

De hecho, como se observa en el esquema, son varios los factores que se han hecho explícitos y que tributan a la utilidad percibida. Entre ellos: las normas subjetivas (subjective norms), la imagen (image), la importancia del (o para el) trabajo (job relevance), la calidad del resultado (output quality) y la demostrabilidad de resultados (result demostrability). Son estos un conjunto de 'determinantes' de la utilidad percibida.

Para ilustrar estos determinantes, supóngase que usted como trabajador freelance decide probar con distintas aplicaciones para el diseño gráfico. Puede que algún conocido como un colega use una herramienta X, y tal persona piensa que usted debería usarla porque a ella le ha parecido útil (normas subjetivas). También, usted ha escuchado que dicha herramienta X es de las más usadas en el campo (importancia del trabajo), crea excelentes diseños (calidad del resultado) y ello es fácilmente verificable (demostrabilidad del resultado). Usted definitivamente se configura una percepción favorable sobre la utilidad de la aplicación X.

Como se ve, este desglose de factores es mucho más específico y explicativo de los motivos por lo cual alguien considera que una tecnología es útil. Pero, ¿y la facilidad de uso percibida? ¿No debería ser igualmente detallada en determinantes para hacer más explicativa a la teoría? De hecho, eso es lo que la versión tres del modelo (TAM3) se propone, utilizando el “modelo de determinantes de facilidad de uso”, Bala y Venkatesh (2008) proponen el TAM3 como un modelo integrado de aceptación tecnológica.

Los determinantes aludidos son: 1) autoeficiencia, 2) percepción de control externo, 3) ansiedad, 4) alegría, 5) disfrute percibido y 6) usabilidad objetiva. Esos factores permiten medir apropiadamente cuando un usuario percibe que una tecnología es realmente fácil de usar. Por ejemplo, si un usuario siente que puede hacer uso con autonomía de un dispositivo (es decir, que no dependa mucho de otras personas para usar el arfefacto) y al hacerlo no siente ansiedad e inseguridad, sino que más bien disfruta la experiencia, puede decirse entonces que percibe su facilidad de uso.

Unificando criterios...

Finalmente, tenemos la Teoría Unificada de Aceptación y Uso de la Tecnología, conocida por sus siglas en inglés UTAUT (Unified Theory of Acceptance and Use of Technology), también un modelo de aceptación tecnológica formulado por por Viswanath Venkatesh, Michael Morris, Gordon Davis y Fred Davis (2003), que aspira explicar las intenciones del usuario para emplear un sistema de información y su consecuente comportamiento de uso.

Esta teoría “ayuda a entender los factores de aceptación” de las tecnologías de información en un entorno de organización (como empresas e instituciones) y representa una compilación del estado del arte en la materia.

Ha sido formulada a partir de varios constructos de ocho modelos que anteriores investigadores han empleado para explicar el comportamiento de uso de sistemas de información. Entre estos modelos previos se cuentan el prenombrado “modelo de aceptación de tecnologías” y otros como “acción razonada”, “modelo de motivación”, “comportamiento planificado”, “teoría combinada del comportamiento planificado y el modelo de aceptación de tecnologías”, “modelo de uso del computador personal”, “teoría de difusión de las innovaciones” y la “teoría de la socio-cognición” (Venkatesh et al, 2003).

Según sus propios autores, el modelo propuesto por ellos se basa en cuatro (04) constructos fundamentales, teorizados como determinantes de la intención de comportamiento. El modelo se presenta en la imagen 3 y se explica como sigue (véase imagen 3).

1) Las expectativas de desempeño (performance expectancy). Se refiere al grado en que un individuo cree que el uso del sistema le será beneficioso en el desempeño laboral o profesional. Es similar al factor de utilidad percibida previamente estudiado y tiene que ver con la motivación extrínseca, el ajuste al trabajo, la ventaja relativa de la tecnología y las expectativas de desenlace. Se considera el factor más importante e influyente con respecto a la intención de comportamiento, tanto en escenarios donde el uso sea voluntario como obligatorio.

2) Las expectativas de esfuerzo (effort expectancy). Esto implica el grado de facilidad de uso asociado al sistema. Tiene que ver con el factor de facilidad de uso percibida ya estudiado y la complejidad de la tecnología. Este constructo es también importante en contextos donde el uso sea obligatorio o voluntario, pero solamente en relación con la experiencia de uso en términos de cantidad. Este factor es más influyente en mujeres que en hombres, así como en las personas de mayor edad, es decir, estos usuarios son más propensos a ser influenciados por el esfuerzo percibido que implica el uso de la tecnología.

3) La influencia social (social influence). Se refiere al grado en el que un individuo percibe que los demás valorarán la utilización del sistema, tanto de personas consideradas influyentes como importantes. Tiene que ver con las normas subjetivas, los factores sociales, la imagen, etc. Resume varios de los factores del TAM2 como una única variable llamada 'influencia social', que no solamente determina la utilidad percibida sino la intención de comportamiento directamente.

El papel de la influencia social con respecto a la aceptación de la tecnología es complejo y “sujeto a un amplio margen de influencias contingentes”. En general, la influencia social afecta el comportamiento individual de tres maneras: sumisión, internalización e identificación. Los últimos dos se vinculan con la modificación de la estructura de creencias de un sujeto y provoca que un sujeto responda a potenciales ganancias de estatus social, pero el primero provoca que un individuo simplemente modifique su decisión para responder a la presión social.

Para ilustrar la importancia de este constructo imagínese un empleado dentro de una empresa tratando de acostumbrarse a un nuevo software implantado. Si el empleado nota que la propia gerencia es reacia a utilizar el software, ello seguramente lo desmotivaría a adoptarlo. También puede ocurrir que si el software es muy popular y es una tendencia entre otros colegas, se sienta estimulado a adoptar el software por el hecho de querer mejorar su imagen.

4) Las condiciones facilitadoras (facilitating conditions). Esto se refiere al grado en que un individuo considera que existe la estructura organizativa y técnica que soporte la adopción de la tecnología. Tienen que ver con el control conductual percibido con base en la existencia de condiciones como conocimiento y compatibilidad, formación por parte de la organización, soporte técnico y otros recursos. Se considera que si estas condiciones son satisfecha, se remueven las barreras de uso. Este constructo influye directamente sobre el comportamiento de uso y tiene un efecto mayor en personas de mayor edad y en personas con mayor experiencia de uso.

Los primeros tres constructos son determinantes directos de las intenciones y comportamiento de uso, mientras que el cuarto es determinante del comportamiento de uso. En este modelo, el género (sexo), la edad, la experiencia y la voluntad de uso se plantean para moderar el impacto de los cuatro constructos en la intención de uso y comportamiento.

Esta teoría, según sus propios autores, constituye una “útil herramienta para que la gerencia pueda evaluar la probabilidad de éxito de la introducción de una nueva tecnología”, lo que adicionalmente resulta ser de utilidad en la toma de decisiones, a fin de diseñar intervenciones de forma proactiva, tales como formación, difusión y publicidad, entre otras, y que puedan ser dirigidas a aquella población de usuarios que resulten ser menos inclinados a adoptar y usar la nueva tecnología (Venkatesh et al, 2003).

De hecho, en una próxima entrega veremos un caso de aplicación de esta teoría para estudiar la aceptación de ciertas tecnologías de software libre en entornos académicos.

ALGUNAS REFERENCIAS

• [1] Davis, F (1989). Aceptación del usuario de la tecnología de información: sistema, características, percepciones del usuario e impactos en el comportamiento. MIS quarterly, 319-340.
• [2] Venkatesh, V., Davis, F. (1996). Un modelo de lso antecedentes de la facilidad de uso percibida: desarrollo y pruebas. Decision Sciences, Vol 27, Nº 3, pag. 451-481.
• [3] Venkatesh, V., y Davis, F. D. (2000). Una extensión teórica al modelo de aceptación tecnológica: cuatro estudios de campo longitudinales. Management Science, 46(2), 186-204.
• [4] Venkatesh, V. y Bala, H. (2008). Modelo de aceptación tecnológica 3 y una agenda de investigación sobre intervenciones. Decision Science, 39(2), 273-312
• [5] Venkatesh, V., Morris, M.G., Davis, F.D., y Davis, G.B. (2003). Aceptación y uso de la tecnología de información: Hacia una visión unificada. MIS Quarterly, 27, 425-478.

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