Reto top 10, algo que compartir: Sobre la serie "Chernobyl" (2019)

"Chernobyl"

Con el primer episodio de esta serie de HBO me pasó lo mismo que con el de la serie Happy valley (2014), simplemente luego de verlos me quedé como ahogado, sin aliento, pensé que no podría continuar.

Me sentí completamente abrumado por lo terrible de lo narrado, me resultó impresionantemente duro ese primer episodio en el que se cuenta la explosión de la nuclear y la manera inicial como fue tan confusa, disparatada y en suma mal gestionada esta tragedia.

Sin embargo, al igual que en Happy Valley continuar viendo la serie fue la mejor decisión. Haciendo la salvedad de que Happy valley es una serie de ficción y Chernobyl narra la tragedia que ocurrió en Rusia en abril de 1986, puedes constatar en ese relato pormenorizado de los hechos, que a pesar de todas las licencias filmicas que se hayan podido tomar los creadores, las proporciones de esa explosión, sus consecuencias son una herida que todavía afecta a la humanidad y al planeta.

Por cultura general todos conocemos algunos datos relativos a Rusia que nos hace tener una mala opinión de este país, de su gobierno, pero constatar por lo presentado en la serie la ignorancia y sobretodo la soberbia de algunos políticos o personas ubicadas en cargos de mando en ese entonces, simplemente avergüenza y horroriza.

Bien es cierto que un país es mucho más que sus mandamaces o políticos (damos gracias por los artístas y científicos que hacen de contrapeso) pero la tragedia de Chernobyl es un testimonio atroz , escalofriante de mala, pésima gestión inicial de un hecho sin precedentes como el ocurrido.

Dirigida por Craig Mazin y Johan Renck, esta serie posee grandes y magistrales actuaciones, tales como las del británico Jared Harris en el papel del físico Valery Legasov, quien tiene la complicada tarea de gestionar una tragedia nunca antes ocurrida en el mundo, o Stellan Skarsgard, como el político Boris Shcherbina, quien consigue apoyar las decisiones que va sugiriendo Legasov ante el resto de los mandatarios rusos, pero también Emily Watson, que aunque interpreta un papel ficticio, igualmente brilla con su actuación tan veraz y humana.

Conmueve el hecho real de que tantas personas, a sabiendas de que se exponían a una muerte segura, arriesgaron sus vidas para salvar a muchos más. Héroes como los 400 mineros o los tres buzos, o las 700 personas movilizadas para limpiar escombros radioactivos, campos o exterminando animales contaminados.

Supongo que en estas grandes tragedias siempre se puede ver lo mejor y lo peor de las personas, que en definitiva no es más que su verdadera naturaleza puesta en evidencia debido a un acontecimiento inusitado.

Pero al menos gracias al suicidio de Leganov y la puesta en circulación de sus memorias entre la comunidad científica rusa, el gobierno se vio en la obligación de corregir las nucleares rusas para impedir que se produjese otra tragedia parecida por las mismas causas.

En un gobierno tan sostenido por mentiras y poses, es de agradecer una verdad que hace realidad cambios que esperamos eviten que una explosión como la de Chernobyl se repita.

En suma, una serie necesaria, brillante, sorprendente, llena de matices, de claroscuros, con un guión intenso y unas imágenes espantosas de lo que la radiación puede hacer a las personas.

Un episodio oscuro de la historia de la humanidad, que merece ser conocido y analizado, comprendido e incorporado a nuestro bagaje como aprendizaje de lo que no ha debido ser pero que sin embargo ha sido, como resultado de una cadena de errores que vistos en su conjunto resultan siniestros, deleznables, despreciables, intencionados y sobre todo de consecuencias devastadoras y terribles.