Serie relatos cortos | La Tienda

Existe una tienda de videos en la cual están expuestas una cantidad inmensurable de películas, documentales, series, música, todo lo que ha existido en cuanto a material audiovisual, pero también lo que existirá, es decir, todo lo que es posible ya está mostrado, así que nada nuevo puede formar parte esta fenomenal tienda y nada puede ser extraído ni replicado. Lo que conocemos como especie forma parte del área etiquetada como Pasado, lo que aún no estamos preparados para ver/experimentar está en los pasillos bajo el letrero Futuro (en letras pequeñas Solo personal autorizado). Todo el material está recopilado digitalmente en un sinnúmero de aparatos de almacenamiento de una tecnología muy avanzada que es compatible con nuestra psique y nos permite conectarnos para revisar la base de datos y encontrar lo que buscamos.

Si eliges algo para ver, un empleado de la tienda te guiará al área destinada para visualizar (término usado por consenso para describir la práctica de experimentar el material contenido en el video) tu elección y estarás ahí cuanto tiempo desees, lo que quiere decir que si por alguna razón ya no quieres continuar viendo, detienes la reproducción y listo; o por el contrario, si quieres verla otra vez (o mil veces más) también puedes. Una característica de esta tienda es que es infinitamente grande y hay espacio para todos los seres pensantes.

Llama la atención que hay personas que siempre ven la misma película una y otra vez: llegan a la tienda, van por su película, la ven una o las veces que quieran y luego se van y regresan al siguiente día a hacer lo mismo. En este sentido están los que ven comedia, ciencia, investigación, medicina, crimen, entre otros, pero también están los que siempre ven dramas, terror, horror, suspenso… Además, hay otros géneros como depresión, ansiedad, paranoia, victimización, drogadicción…

Adicción. Sí, eso es. Son adictos a un género en específico y es bastante difícil que elijan otro, a menos que esté relacionado, lo que quiere decir que casi todos (los humanos) tienen uno preferido y dos o tres secundarios como para variar. Son resistentes al cambio, se niegan rotundamente a alterar su orden prestablecido, tanto así que incluso llegan a despreciar, condenar y odiar los demás géneros con los que no se sienten identificados y a quienes prefieren ver esos géneros: alguien adicto a la paranoia odiaría (incluso a muerte) a quien es adicto al género romántico.

Con respecto a lo que está clasificado como Futuro, se puede observar que hay otras especies disfrutando de todo ese material, sin embargo, no he podido notar ningún humano en esos pasillos y por más que he querido curiosear esos títulos siempre hay algo, un no sé qué, que me lo impide. Me han dicho que solo unos pocos han podido ir pero solo si son apadrinados por alguien. Estuve hablando con uno de esos seres que se mostró amable conmigo y me dijo que nosotros los humanos tenemos muy poca capacidad de integrar nuestro lado oscuro que en vez de aceptarlo como nuestro, solo lo condenamos y expulsamos de nosotros. En simultáneo señaló a dos personas que estaban peleándose: uno era un abogado, el otro un estafador. Nadie detuvo esta pelea, nadie intervino. La razón: libre albedrío. Luego de esto, el ser con quien estaba charlando se retiró a elegir un título bajo Futuro. Una sensación que solo puedo describir como desagradable me invadió. No pude seguirle.

Al salir de la tienda, los humanos proyectan en su entorno la película que vieron, ya que no pueden llevársela ni replicarla. Estas proyecciones son parecidas a los títulos que experimentaron en la tienda pero transformados y adaptados a la realidad de cada quien. El humano está capacitado para amoldar su entorno a su forma de ser. Lo de afuera se corresponde con lo de adentro, entonces el que es adicto a ver películas de crimen, a su alrededor ve mucha criminalidad; quien elige el género romántico, vive un entorno en el que el amor florece, en sí y en los demás; el que elige películas bélicas, siempre vive en un ambiente hostil donde todo es muerte y violación de derechos. Esto me pone a pensar ¿cuáles son los géneros que elijo? ¿Por qué los elijo y no paso a otros? ¿Si cambio mis géneros favoritos, cambio mi entorno? Es algo interesante a considerar.

En la tienda ya está todo lo creado, y los que asistimos a ella solo podemos transformar, al salir, lo que ahí vemos y con ello modificar el mundo que nos rodea, es por esto que mi vida ha sido influenciada por una frase que dejaré aquí: