¿Dónde estás Dios?
Dios, ¿Quién eres? ¿Eres justo y misericordioso? Por el momento son solo palabras, basta con leer un periódico para mirarte con malos ojos, dime ¿Dónde estabas cuando un padre siquiera pensó en violar y matar a su esposa y sus hijos. Dime ¿Dónde estabas cuando una madre lloraba en un hospital rezando para que su hijo no muriera de hambre? Dime dónde estabas cuando un padre llora porque su esposa e hijo murieron en el parto? Pareces estar bastante ocupado, pero supuestamente la última vez que se te vio dando una vuelta por aquí fue hace dos mil dieciocho años, hay gente buena sufriendo y gente mala viviendo a todo dar, ¿no es eso doble moral por parte de sus representantes eclesiásticos? ¿Ha sido todo un engaño? ¿Es solo un invento para tener algo a lo que aferrarse? Pienso que todas las religiones tienen esa misma tónica, parecemos solo ovejas de un gran rebaño y es algo simplemente cultural, ya que si no fuera por la evangelización, en Latinoamérica seguiríamos creyendo en el dios de la lluvia y el viento, muy seguramente siendo llamados primitivos por las religiones estructuradas desde el otro lado del mar.
No pretendo que haya un mundo sin mal, solo la verdad, deseo la verdad que está detrás de todo mal y todo supuesto bien. Pido que las personas comprendan que cada uno de nosotros comprenda que somos dueños de nuestro destino, que no nos graduaremos, obtendremos un ascenso o nos retiraremos gracias a nuestras plegarias, sino a nuestras acciones impulsadas por nuestras deseos y ambiciones, no todo sale como queremos, eso es algo seguro, ni rezando a todos los dioses podremos asegurar nuestras voluntades, solo con esfuerzo y convencimiento por lo que queremos. Sean buenas personas, que hasta sus sueños nocturnos sean buenos, llénense de deseos y metas que le den un rumbo a su vida.