UN MILAGRO EN SANDRA MILENA

Es muy grato conocer colombianos como virgilio pallares y su hija Sandra Milena, quienes lideraron una campaña nacional para recoger fondos y ayudar a la niña para su recuperación. Todas las ideas que llegaron a su mente ocuparon el tiempo de la familia, en una jornada que les llevo a Brasil y México para que Sandra Milena fuera operada varias veces, recuperara la verdad de su rostro y pudiera vivir como una persona normal. La solidaridad de los medios de comunicación y muchas otras personas, no se hizo esperar. Y fue asi como se le devolvieron las facciones a la niña y la felicidad anhelada. Ahora, virgilio y Sandra han creado la fundacion Sandra Milena, para ayudar a conseguir un rostro y una sonrisa nueva a otra personas que padecen el síndrome de Crouzon, así como para desarrollar las actividades necesarias para lograr este fin

Quienes creemos en la generocidad de los colombianos, en su sentido humano y solidario, estamos seguros que acudiran al llamado de esta fundacion para que otros niños tengn salud, alegria y confianza. Siento que se trata de un caso absolutamente ejemplar, en el que la fe y la lucha contra todos los obstaculos que puede tener un ser humano en determinado momento de su vida, encarnan la fuerza humana y espiritual que se requiere para que se obre realmente un milagro, como este que ha tenido lugar en la vida de una niña afectada desde su nacimiento con el sindrome de Crouzon, que gracias a Dios, a la fuerza luchadora de su padre virgilio, convoco alrededor de ella una maravillosa reaccion solidaria entre sus semejantes, que le permitio tener un rostro para enfrentar al mundo, Y construir eso que todos los hombres hijos de Dios estamos en la obligacion detener, ilusiones y esperanzas. Ilusiones para sacar desde el propio corazon todo aquello que siempre hemos querido para vivir, y esperanza para confiar en que un dia llegaremos a tenerlo

Sandra Milena una niña con todo en su contra, pero con Dios a su lado, empieza a descubrir desde edad muy temprana el valor de la valentia, y a poner en practica un extraordinario deseo de remontar la corriente de su propia vida y ser, contradiciendo lo que algunos podrian llamar el destino, definitivamente una persona nueva, alguien con derecho de afrontar el mundo. Y es ejemplar por otro lado, porque afortunadamente pudo contar con el amor incondicional de su padre, quien desafio todo cuanto de adverso tuvo ante si para ayudarle a construir un rostro sano, armonioso y una mejor vida para su hija