Muy interesante post, me ha encantado la narrativa del mismo y como entrelazas el proceso de madures con la lectura, a decir verdad yo inicie desde muy pequeña con cuentos infantiles y poco a poco fui cambiando. como a ti (en la actualidad), me gustan los libros que me mantengan en suspenso, que me atrapen desde la primera linea, Drácula indudablemente es un clásico, en mi periodo de adolescencia leí texto de este estilo, aunque a mi madre no le gustaba, yo igual me escurría en la biblioteca de mi tío y pude leer: La profecía (David Seltzer), La semilla del diablo (Ira Levin), El silencio de los corderos (Harris Thomas), entre otros, aunque también me apasiona un buen libro como por ejemplo Ilusiones (Richard Bach). Ya para concluir, te comparto el pensamiento que corrió por mi mente luego de leer tu post: la lectura es un mundo mágico que nos abre infinitas puertas, ¿por qué limitarnos a a un solo libro?...