¿Tú mereces ser amada?
En mis estudios y prácticas de crecimiento personal he encontrado que algunas corrientes utilizan la frase “Yo merezco” como bandera. Y siempre me crean la misma molestia, así que decidí buscar los fundamentos de mi rechazo y saber si eran válidos. Las preguntas que me planteé fueron: ¿Qué digo cuando digo merecer? ¿Qué encierra ese concepto que me produce rechazo? Y así comencé mi investigación:
Me fui a google y tecleé: “Yo merezco”. Entre los resultados encontré:
Yo merezco: Manifiesto para mejorar mi autoestima - Befullness
Merezco todo lo mejor que la vida puede ofrecer Abundancia33
yo merezco lo mejor, y yo acepto lo mejor, ahora El Camino a Una ...
Querido yo, merezco que me trates mejor - La Mente es Maravillosa
DIETA DEL MERECIMIENTO: DIA 3 – TRABAJO CON EL ESPEJO ...
Estos son los primeros títulos que presenta el buscador. Todos coinciden en hacer afirmaciones sobre el merecimiento como una alternativa para elevar la autoestima… Y eso está bien, pero ahora con mayor énfasis el concepto me sigue chocando. Así que me voy a la definición y etimología del término.
La definición que me ayudó a aclarar mis ideas la encontré en ver y refiere lo siguiente:
Origen etimológico de la palabra: proviene de la palabra latina mereō, merēre (que significa "tener mérito, ganarse"), habiendo pasado por el latín vulgar *merescere.
- v. t. Ser o hacerse digno de algo. Ejemplo: merecer un premio; el castillo merece una visita (ú. t. c. pr.).
- tr. Hacerse digno de premio o de castigo
Bien, con estas definiciones he quedado clara que el problema no es la palabra, ─Por supuesto─ El problema es el contexto donde se usa, es decir cuando la usamos para referirse a un objeto, definitivamente es válido. Ejemplo:
En la primera acepción es perfecta: El mejor plato, merece el primer lugar. Porque la acción recae sobre el plato.
En la segunda acepción: “Hacerse digno de premio o de castigo” la cuestión cambia su sentido, se refiere a la persona como tal y cuando hablamos de autoestima y de las relaciones interpersonales, el término me parece inapropiado, les comento por qué.
Hablemos de autoestima
Para ello voy a tomar el título de uno de los post que visité: "Querido yo, merezco que me trates mejor". Sin ánimo de juzgar, me pregunto: ¿Cómo alguien puede elevar su autoestima partiendo de ésta premisa?, ¿Desde dónde le estoy hablando a mi yo?, ¿Qué le estoy afirmando y reafirmando? A mi modo de ver es un grito de autocompasión: ─“¡Por favor yo me he portado bien, no me trates así!” ¡Ah, sin más comentario!
Hablemos de relaciones interpersonales
Volviendo a la premisa originaria: “tú mereces ser amada”, me pregunto: ¿Es que el otro es un premio?, ¿Tú te portaste bien y por eso mereces que el otro te ame?; ¿Tú te portaste mal y por eso mereces un castigo?
Al igual que en el caso de la autoestima yo veo dentro de la concepción un componente de víctima, de ruego, de sumisión y al mismo tiempo encierra un componente de exigencia y manipulación. Los dos componentes son los que originan mi rechazo.
Considero que hay cosas en la vida que, si no te las dan, tú tienes que exigirlas, son tus derechos como persona y no pueden estar sujetas al merecer, por ejemplo: el respeto, el buen trato, la relación de igualdad.
Hay otras que considero que no se pueden exigir, y que tampoco se trata de si las mereces o no, porque esto poco importa, entre ellas: el amor de la pareja, el compromiso y el cariño, pues es decisión del otro dártelo y es tu decisión quedarte si no lo recibes.
Cuando hablamos de amor dentro de la pareja tú amas y quieres, deseas ser amado por esa persona pero por más que tu sientas que eres merecedor de su amor (porque consideras te has portado bien, te has dedicado…) y por esta razón: ruegues, pidas o manipules, sencillamente la persona siente o no siente ese amor.
Si lo siente, perfecto, están vibrando en la misma frecuencia y, ¡A disfrutarlo!
¿No lo siente? pues amig@ no queda otra sino aceptar, ¡ojo! aquí es oportuno aclarar: aceptar no es resignación, es resiliencia, es levantarte, mirando para los lados, y poder ver los caminos que la vida te sigue ofreciendo.
Este post llegaba hasta aquí. Cuando le pedí a mi hija que por favor lo leyera y lo comentásemos me sugirió que escuchara una canción de Julieta Venegas llamada “Me voy”. Su letra me pareció apropiada porque recoge algo de lo planteado en el post, cito estos versos:
“No voy a llorar y decir que no merezco esto
Porque es probable que
Lo merezco pero no lo quiero”
!Hola @damarysvibra! Este tipo de planteamiento que haces en tu post invitan a la reflexión sobre los procesos comunicacionales en su totalidad. desde el punto de vista semántico encontraremos el significado "compartido" de algunas palabras, desde el punto de vista pragmático otras definiciones. Mientras leia tu post y te referías a otro post: "Querido yo, merezco que me trates mejor" , comentas que era un grito de autocompasión , recordé los modelos de comunicación de Virginia Satir, la de la persona que implora, suplica ser querida. Me inclino más a la parte subjetiva que está presente en el leguaje, ya que para cada persona las palabras tienen significados muy personales en función de sus experiencias de vida y modelaje. Por ejemplo la palabra "mar" para algunos es sinónimo de relax, para otros puede significar "peligro". Una de las premisas con la que se fundamenta la PNL y que aplico, es aquella que dice: El verdadero significado de tu comunicación es la respuesta que obtienes. En estos días un amigo me consultó y me decía que no estaba alcanzando el éxito a pesar del empeño que le ponía, de repente me dice: " Creo que debo trabajar el merecimiento", yo le hice una sola pregunta: ¿Cómo sabes que es merecimiento?.... indagando luego un poco más me dijo que el fin de semana había asistido a un curso sobre merecimiento, y compró el concepto completito, ahondando más en su caso, se trataba tan sólo de tener más opciones de pensamientos y estrategias para alcanzar lo que buscaba.
Hola @salomonca. Gracias por tu respuesta y coincido contigo en que la interpretación de las palabras las hacemos desde nuestras vivencias, creencias y hasta de nuestras necesidades.
No sé si te entiendo. A mí el "Yo merezco" me ha causado rechazo al escucharlo de una mala persona, que no da ni un vaso de agua.
@amaponian, en línea general creo que "El yo merezco", es válido cuando nos referimos a un objeto incluso a un reconocimiento por un esfuerzo digamos que: deportivo, labora, educativo... pero en cuanto a sentimientos, la palabra "merecimiento" no me encaja. Gracias por comentar
Hola @damarysvibra, la verdad es que no lo había notado. Pero ahora que lo mencionas, “Yo Merezco” suena algo así como egoísta, tal vez como una sobrevaloración en el caso de un premio, o subvaloración en el caso de un castigo. Es muy diferente cuando es otra persona la que nos dice “Tu Mereces”, no sé si logré explicarme, pero de verdad no suena bien, saludos
@sir-lionel. El asunto como que se empastelo, en todo caso, ser merecedor resulta ser más subjetivo en la valoración del otro. Gracias por comentar.
Creo que todos merecemos en cierta medida ser amados; hasta aquella persona que ha hecho mal, quizá recibiendo amor pueda llegar a cambiar su actitud.
Claro amiga, toda persona por el hecho de "SER" tiene el derecho de ser amado y respetado. La palabra merecer de alguna manera le quita ese derecho. Gracias por comentar.
La mereces: ¡Ovación de pie..!
Un escrito muy reflexivo que usa la introspección para colocar en lugar justo, un término mal usado..! ¡Votado por Engranaje!
Gracias equipo de engranaje. Cada día más engranada.